domingo, 30 de agosto de 2020

120 Los domingos, cavilar 35 Covilación Si se puede actuar así... Fernando Merodio 30/08/2020

120 Los domingos, cavilar

35 Covilación

Si se puede actuar así...

Fernando Merodio

30/08/2020

(...) si se puede actuar así, muchos dictadores pueden imitarlo” (El País 25.08.2020. Svetlana Alexiévich. Bielorrusa. Premio Nobel de Literatura 2015).

En Bielorrusia estamos indefensos. Lo que sucede es horrible (Idem).

El fantasma que ahora recorre el mundo es el de un soez abuso político convertido en la farsa a que se refería Karl Marx en “El 18 brumario de Luis Bonaparte” y que, aprovechando nuestra bovina depresión y estatus de encogidos súbditos, nos confina y limita en el ejercicio de libertades fundamentales -la esencial individual, a la acción política, la propia imagen, la libre expresión,...- nos dificulta, pues todos somos cobardes sumisos, hablar, incluso respirar e, ilegal y urgente, impone situaciones y/o tramita leyes que convienen al oscuro poder, el real, el del capital. Y ni protestamos.

Ya he explicado otras veces que, además del inconcebible -ha habido 4 muertos de 84 a  97 años por el virus en agosto en Cantabria- terror que los serviles medios de comunicación del sistema han inoculado en un tejido social que, aun atrapado en las movedizas arenas de la cobardía que sembró el pequeño general rollizo, se somete sumiso a una mascarilla -si alguien duda de ello, que se solace, además, en la patética ceremonia que, sin atisbo de mínima persecución real, oficia, gallina nuevo rico, "Evita" Iglesias-; (ab)usa el poder, al tiempo, de la devastación que la “alarma” causa en libertades/derechos y, de modo sigiloso, con todos -excepto ellos- confinados, los “políticos” inician notables y sucias acciones político-administrativas que, además de sorprender a algunos ciudadanos, crean alarma e inseguridad jurídica en asociaciones sin ánimo de lucro que viven del trabajo y pequeñas aportaciones de sus miembros, (pre)ocupadas por frenar los muy graves daños que causa el excesivo y cada día más visible compadreo de corporaciones transnacionales -causa del actual caos- y la -cada día más mercantil- “casa común” de quienes hacen de "la política" lucrativa profesión.

En España, ya lo he dicho otras veces, por su ilegalidad, actual trámite y carencia de lógica, entre otras nos acosan, perjudican y exigen freno urgente actuaciones político-administrativas contrarias al interés general, ilegales, tan radicalmente nulas como 1) la idea de reforzar el Tratado sobre la Carta de la Energía, de 1994, que otorgó a las grandes corporaciones el derecho a demandar a los Estados con la ilógica/injusta cláusula ISDS -Investor State Dispute Settlement- "Solución de controversias entre inversores y Estados", que las permite hacerlo, no ante los Tribunales, sino ante órganos ad hoc de horribles abogados privados, que ellos llaman "árbitros", siendo inadmisible que, en lugar de anularlo, en setiembre los ministros de Energía UE, incluida España, pretendan reforzarlo, 2) que, con la -falsa- excusa de energía limpia para todos, el Plan Nacional Integrado de la Energía y el Clima, PNIEC, sin información ni transparencia, inicie en España su EAE, Evaluación Ambiental Estratégica con él ya tramitado, muestra de que se aprobó sin haberse evaluado sus impactos, 3) que se haya enviado al consejo de ministros un proyecto de Ley del Cambio Climático sin información, que trata de favorecer el monopolio energético de las multinacionales y 4) que se haya aprobado el Real Decreto-ley 23/2020, 23 de junio, sobre medidas en materia de energía, que dice desarrollar las dos normas anteriores, aun sin aprobar; son cuatro, entre otros, actos esenciales para condicionar nuestro presente y futuro con la dolosa evidencia de haberse iniciado al tiempo, sin informar y (ab)usando del excepcional estado de alarma y nuestra -casi- imposibilidad de hablar, incluso respirar, con tal desdén hacia bienes, libertades y derechos sociales que la ministra, igual que Revilla, ni siquiera contesta a razonables quejas escritas, sabiéndose protegida, no hay duda, por “su libertad", o sea, por nuestra falta de ella.

En nuestro muy pequeño, burocrático y, por ello, muy caro y fallido territorio, los viejos rescoldos nacionalsindicalistas del Revilla’s team, reacio, es lógico, a aplicar con rigor las exigencias de un Estado social y democrático de Derecho fingen liberar su frustración por el caos energético e incapacidad para desde la -lobbysta y, entre otras cosas, inepta- consejería de industria implantar un solo aerogenerador de modo legal con el juguete, de su favorito color amarillo, instalado -para nada- frente a las playas del Sardinero y fútiles, estériles debates -por supuesto, no en Derecho- sobre una opinable escollera natural, de piedra, olvidando las catástrofes del caos energético y urbanístico, nuestra colaboración al calentamiento global, el paro y la desigualdad sistémicos, el fracaso de sus planes industriales, el caro ridículo de la "Universidad de Comillas", la demolición de la vieja Diputación “republicana”, ¡memoria histórica!, la impudicia del Museo de Prehistoria y los “caprichos culturales” de los ricos, la fábrica de fibroyeso, Sodercán, el "agudo" Plan de Gobernanza, las viviendas ilegales sin demoler, el despilfarro de los Años Lebaniegos, Vuelta Ostrera, el TAV, el ilegal regalo de la mejor zona del puerto de Santander a una poco ejemplar fundación, la Cantabria -solo- de servicios,..., y un larguísimo etcétera de frustraciones y despilfarros, así que, visto que indecentes, ridículos sermones en prime time televisivo no resuelven nada, debemos hacer balance, buscar solución y exigir que, quien deba, rinda cuentas.

Todo está preparado para que, con apoyo en el terror/miedo, la corrupción mande; al oscuro poder real, el del capital, no lo vota nadie y no hay tres poderes políticos, Montesquieu ha muerto, los parlamentarios, de holganza permanente, son la misma casta que el gobierno, la de los de partidos burocráticos (de)pendientes del poder real, mientras el tercer poder político, judicial le dicen, lo conforman, controlados por parlamento y gobierno, jueces y fiscales funcionarios, alguno bueno, el resto regulares, malos o muy malos y, abajo, el ciudadano, sólo, vigilado, de uno en uno, con el carné en la boca bajo la mascarilla, asustado y -más vale que- callado; así es, lo sabemos, la cerrada clase política, oligarquía aglutinada en partidos cuyos miembros, ajenos a Machado, no hacen camino al andar, lo tienen hecho desde que, casi niños, se afilian a las “juventudes” ¿Qué futuro tiene un país en el que los cientos de miles de miembros de tal casta se cubren de privilegios y un velo informativo que convierte las mayores obscenidades en minucias del casposo día a día? Necesitan que tengamos miedo, mucho miedo para que permitamos que, cual hindúes, ellos actúen como nacidos de distintas partes del cuerpo de Brahma y, en función de ello, sean miembros de la casta que define su superior estatus.

Leí hace tiempo a Savater que lo que define al ser humano no son sus instintos, ni siquiera sus genes, sino su capacidad para elegir y ejecutar acciones que transformen su entorno... o a él, y es este, sin duda, un muy buen momento para practicar, -volver a- ser humanos, ejercer nuestra capacidad de transformar y, para animarme, en los recovecos del fin de semana releo “Love’s lovely counterfeit”, “El amor es una deliciosa falsificación”, en España titulado, no sé por qué, “Ligeramente escarlata”, magnífica historia de James M.Caín sobre una ciudad, la nuestra por ejemplo, corrupción, dinero, elecciones, políticos, o sea delincuentes, e impregnándolo todo la deliciosa falsificación que, a veces, resulta ser el amor, algo que, sin querer, me llevó al 1933 de esta misma España, cuando la revista “Tierra y Libertadpublicaba “¡A las barricadas!”, himno de la CNT, “Warszawianka”, la “Varsoviana” que en 1885 había compuesto el polaco Waclaw Swiecicki para animar a la lucha obrera: “Negras tormentas agitan los aires / nubes oscuras nos impiden ver, / aunque nos espere el dolor y la muerte, / contra el enemigo nos llama el deber. / El bien más preciado es la libertad / hay que defenderla con valor y fe. / (...) / ¡En pie pueblo obrero, a las barricadas! ¡Hay que derrocar la reacción! / ¡A las barricadas!”. Qué tiempos aquellos.

Si ineptos corruptos como Sánchez, Iglesias, Revilla & Co pueden actuar así y no reaccionamos significa que, peor incluso que los indefensos que luchan de Svetlana Alexièvich, no somos humanos o, tal vez, todos estemos muertos.

No hay comentarios:

Publicar un comentario