sábado, 26 de abril de 2025

Lo cotidiano.101 De Hope, la esperanza “progresista” Fernando Merodio 26/04/2025

Lo cotidiano.101

De Hope, la esperanza “progresista”

Fernando Merodio

26/04/2025

La esperanza se puede definir, de modo sencillo, como optimista estado de ánimo pasivo, basado en la posibilidad -incluso probabilidad- de hechos favorables para nuestra vida o la situación del mundo, la sociedad en general, diciendo la RAEque surge cuando se presenta como alcanzable lo que se desea”, mientras en el entorno cristiano, al que -¿lo ignora alguien?- pertenecemos es virtud teologal tan poco lógica como la fe y la caridad, “por la que se espera que Dios dé los bienes que ha prometido”, siendo yo opuesto a todo ello y partidario, por contra, de la idea de Paulo Freire, serio pensador marxista, gran pedagogo que la define como necesidad para lo esencial del ser, al que mueve y señala la dirección de su lucha.

El Roto 25.04.2025

Francisco, Trump, Putin, XiJinping, líderes sindicales/subsidiados… y, nuestro, Sánchez,

El fallecido obispo de Roma, pontífice máximo del influyente grupo socio-religioso de los fieles a Cristo, del hebreo Mesias, el ungido, el que fue elegido para un cargo muy notable, sinónimo de la figura de Jesús de Nazaret del que, reconstruido con método histórico, nos cuentan qué sintió, pensó, dijo, hizo, no siendo -¡es tan poca la solidez de los datos históricos!- fiable que este Jesús coincida con el real y; al ser yo de los que piensan que su hasta el lunes representante en La Tierra mejoró muy poco su triste iglesia, con menos datos que su paisana Leila Guerriero -de lo muy poco que aún leo en El País- no sabría decir si fue un charlatán argentino de los que convierten un juego, el fútbol, en filosofía, o “un populista sin remedio, un peronista imperdonable” o, peor incluso, cuál fue su actitud cuando desaparecían -a manos de, cada día más caros, militares por supuesto- los jesuitas Yorio y Jalics, o también su real postura ante “lo de Venezuela” o la grave corrupción mafiosa de las finanzas vaticanas,… así que, igual que Leila, no reescribiré su historia cual Ministerio de la Verdad descrito por George Orwell en “1984”, preocupándome que, además, al marcharse, nos recomiende -¿sin luchar?- la virtud cristiana, tan inane como la fe y la caridad, de la esperanza, en lo que racional, lógico no estoy de acuerdo.

Sin olvidar la indiscutible -¿buena o mala?- influencia del -como Sánchez el Malo- progresista Francisco, muerto en pleno jubileo de la inane, pasiva, dañina para el débil Esperanza, sobre todo jesuita que, según Ignacio Peyró se movió entre un poeta pacifista italiano y un militar español mandón o, lo que es igual, entre “la lírica de Asís y la disciplina de Loyola”, inclinándose tanto hacia el mando militar que, lo mismo que Trump hace con su Tribunal Supremo y tantas otras cosas o nuestro declinante Sánchez el Malo con sus ideas, su familia y entorno, su Fiscalía, su CGPJ, su Tribunal Constitucional,…, todo suyo, él ha adulterado el Sacro Colegio Cardenalicio que, sin democracia, manda,... y no es eso, no es eso.

Magnífico ejemplo de lo fuertes que son la demagogia y el capital con su publicidad engañosa

Coincide que ahora TV2, la voz de su amo, despliega, no les queda otra, la caduca, falsaria, insufrible demagogia de Hope, disfraz de sumisa esperanza laica que, en sus dos primeros, insufribles, trillados, inanes episodios, dice que está en nuestras manos, las de todos, la victoria sobre la -pienso- imparable destrucción por caos climático que, tan alarmante, se describe -solo- para asustar al principio del sectario, laxante tráiler, con actividades tan sencillas para frenarlo sin tocar al capital, a ese cruel 1%, cosas tan en nuestras manos como frenar en un paradisiaco lugar la pesca que esquilma -¿qué dirán de ello los indígenas del Istmo de Tehuantepec?-, potenciar, sin que intervengan política, justicia, dinero,…, solo con genial imaginación, la agricultura regenerativa, usar hormigón ecológico -¿como, a toneladas, quieren hacer los gigantes Iberdrolo y Saandero y su influencer -lo explicaremos- Valcarcio al implantar molinos de 200 m. en la -muy protegida- sierra del Escudo, propiedad en mano común, solo, de los vecinos?-, o el trillado ejemplo de las bicicletas de Ámsterdam, o lo que contarán -un cuento- en los cuatro episodios restantes, pudiendo verse que el tráiler acaba con la sabida solución de miles de placas y aerogeneradores, destrucción capitalista que empeora el caos; sin querer, Trump, al frenar la economía en los países -que dicen- avanzados es el único que toma -impensadas- medidas contra tal caos.

Flavita Banana 21.04.2025

Experto gobernante frenando el intento de explicar científicamente el caos climático

Coda sobre lo real y -lo siento hijo, solo sé un poco de lo que es mi vida- un vistoso ejemplo personal.- Al ser parte mía y de mi -poca- gente, no se me ocurre una mejor forma de lucha -en esta sociedad marchita y con ejército, guardia civil, policías, balas israelíes,…en manos de Trump, Xi Jinping, Putin, Netanyahu o nuestro Sánchez el  Malo, éste por un rato- que la de usar las -malas- leyes y los -malos-  tribunales de “ellos” para frenar y (de)mostrar lo egoísta, dañino, desleal que es el 1%, atacarlo, golpearlo hasta donde sea posible, como aquí hace esa Plataforma de unos cuantos activos, concienciados vecinos que en el pequeño, bello territorio que al mórbido de las anchoas -y otros- vino bien (de)limitar y llamar como lo (de)limitan y llaman, percutir, percutir, percutir,…, ganarles juicios -por lo contencioso o lo criminal-, explicar en la práctica, como en la pizarra de Flavita Banana, hace la -sabia- maestra, nuestras razones, despreciar a -y reírse de- los expertos en tizas y, tras oírlos explicar cómo no hay que cogerlas, pintarlos la cara con ellas y armarnos con el vigor preciso para no vivir -solo- en la inane, sumisa esperanza de los idílicos cuentos de la RAE, el sumo pontífice o TVE2 con su demagógico Hope y, por el contrario, con la pedagogía que esbozó Paulo Coello, ir creando las pequeñas -y muchas- bolsas de resistentes que, marxista, propuso -hasta hace poco- el crítico de arte, poeta, novelista,…John Berger.

Coda final previa al Madrid-Barcelona, gota en el océano.- La política/Sánchez, influida/forzada por egoístas, enloda -aún más- la pocilga Negreira & Co del fútbol y hay que poner pie en pared y refutar ya la -burda- mentira -en un país corrompido por políticos venales, egoístas mínimos y asesinos no contritos- de que fue/es “equipo del régimen” el presidido en la (in)civil guerra por el ejecutado secretario general del PCE, acabada ésta por Santiago Bernabeu, monárquico no franquista y hoy bien gestionado -capitalista- por quién -ignoro si bien o mal- se enfrenta a la estructura que manda en el fútbol, un equipo que,  ya con 15 champions, ganó su primera liga post-bélica en 1953-54, cuando el Atlético Aviación ya tenía 4 y el més que un club, impune padrino mafioso del dirigente arbitral que vendía influencias, 5, lo que, cotidiano/tolerado con desidia, hará que en mi próxima crónica intente relatar lo que hay, adelantando ya que amenazantes ruedas de prensa de impunes jueces/parte poco fiables, que -art. 23 Ley 40/2015- no se inhiben/abstienen, exigirían para defender -al menos la imagen- del imperio de la norma, que el mejor club mundial de la historia no colabore en el juego.

viernes, 18 de abril de 2025

Lo cotidiano.100 De la civilización según Manuel Ángel Castañeda (Tiempo de canallas) Fernando Merodio 18/04/2025

Lo cotidiano.100

De la civilización según Manuel Ángel Castañeda

(Tiempo de canallas)

Fernando Merodio

18/04/2025

El 16 de abril, Andrés Rábago, El Roto, y el hijo menor de Luis Martín-Santos, 1924-1964, psiquiatra, autor de “Tiempo de silencio”, inteligentes ambos, presentaban en la librería Gil una nueva edición, ilustrada por el primero, de la novela que, en 1962, cuando con 16 años yo aterrizaba atónito en Madrid, “el foro”, a estudiar Preu, en la gris, triste España de Franco, lo mismo que el equipo de Santiago Bernabeu, Di Stéfano, Puskas y Gento me había generado autoestima al mostrarme, niño, que desde años atrás éramos, como aún hoy, capaces de ganar, serios, a cualquiera, me permitió comprobar con su -para mis 16 años de entonces- difícil lectura que en la misma triste España había lugar para la inteligencia y pude en persona agradecer, de nuevo, a El Roto su diaria editorial/viñeta, tan ajena a este El País y a Luis Martín-Santos hijo, lo que, avatares de la vida, no pude transmitir a su padre.

Carroñeros (los molinos y los que, de espaldas miran obras -ilegales- en El Escudo) y mentiras

Han pasado muchos años, los tribunales han anulado la primera autorización de un polígono industrial eólico, ¡50 Mw! de esos sobre los que El Delirio Montañés miente y miente repitiendo que ya están casi implantados y hoy, en la España cutre, muy cutre de la ley mordaza y la corrupción rampante de Sánchez el Malo y su troupe, el 14, día en que entré en el tramo 80 de mi andado camino vital, un amigo me enviaba el recorte de la página 33 de tal Delirio -de igual cuadra que el gigante Iberdrolo- del día anterior, 13, domingo en que, bajo el feo busto fotográfico de un sujeto con cara de antiguo, gafas, chaqueta y corbata, hay una “Opinión”, prístina imagen de lo que nos ahoga, titulada “El bucle ecologista” y subtitulada, con estéril ofensivo afán, “Los mismos conservadores -¿será ‘conservacionistas’?- que exigían poner punto final a las centrales de carbón, fuel y uranio para sustituirlas por -olvidó escribir ‘las de’- el viento y el sol  presentan una riada de alegaciones contra los parques eólicos y las placas solares”, maliciosa, agresiva estupidez que corona con un postrer, lapidario párrafo, respuesta de mente enferma a su propia pregunta, “¿Por qué?”, con un para qué, “Quizás para que no quede en evidencia la diferencia de nivel de bienestar entre los países capitalistas y democráticos y las dictaduras comunistas”. ¡Uf, y -siendo así, difícil de explicar- le dejan escribir -y lo publican-, aunque sea en un delirante panfleto!

Debiera ser de lectura obligatoria

Son estos, desde hace mucho, lo explicó muy bien, biográfica, Lillian Hellman, amante/sostén de Dashiell Hammet, ambos víctimas del siniestro McCarthy, “Tiempos de canallas” cuya ignominia remarcó Ring Lardner Jr. en “Me odiaría cada mañana”, para que quien hoy escribe esas cosas contra todos en apoyo del gigante Iberdrolo sea el mismo que, ¡no cambian!, si acaso a peor, sin que, más reciente que de lo de los doloridos tataranietos de asesinados en las cunetas, lo recuerde nadie, cuando el luchador PCE aún  -por impulso de, entre otros, la recién vuelta de vacaciones PSOE- era ilegal, coleteaba el proceso 1001 contra la dirección de aquellas CC.OO, en las cárceles se pudría gente de Marx o el fascismo tiroteaba -matando- a abogados laboralistas, en un medio de aquí, una gacetilla de MAC, reporter Tribulete, señalaba que en la calle Castilla 11, Santander, el PCE, no las CC.OO., tenía un despacho laboralista –pagado por mí, con dinero de Rosa, hoy fallecida, y mío- y en aquellos 70s, con padres conservadores, una mujer muy joven asustada, es lógico y dos niños de menos de 5 años, me identificaba, junto a 2 personas más, como titular del mismo, infamia a la que, desde 1979, siguieron 30 años como director del panfleto que la iglesia regaló a los restos de UCD, para que, en 1983, se aliaría con lo peor del capital vasco, convirtiéndose en el dañino Delirio actual, pasando él, en 2012, con apoyo del gobierno regional y, ¡uf, atufa!, los Botín, a presidir/condicionar el Ateneo.

Bello edificio, 1937, del arquitecto, presidente del Ateneo Popular, Deogracias Mariano Lastra

El Ateneo Popular de Santander fue fundado en 1925 y arrasado, 12 años después, en agosto de 1937, tras entrar las tropas fascistas en la ciudad, dejando el ejemplo de su actividad y las huellas de un armazón sociocultural en la vida santanderina, de lo que, material, aún queda el edificio que, inaugurado en enero de 1937, planificó como sede social, su presidente tras Luciano Malumbres, marido de Matilde Zapata, o Manuel Llano, el arquitecto Deogracias Mariano Lastra para, tras años expropiado, hoy acoger esa cosa (im)popular que dicen -solo- Ateneo de Santander, al que me impide entrar el asco a la caspa de personajes como el que, contra la lucha de vecinos, pueblos de nuestro sur frente al caótico atropello del capital eólico, usurpa girones de lo que debiera ser libertad de expresión de todos para decir lindezas como la de su, sin pudor, admirado “capitalismo democrático” y el odioso, alejado de Marx “dictatorial comunismo” del que informó -¿alertó?- en tiempos canallas como este y, seguro, aún más peligrosos, diciendo -¿(pre)ocupado por los niños de África o por el gigante Iberdrolo?- que “todos los habitantes de la tierra -¿se referiría a La Tierra, quinto mayor planeta de los ocho del sistema solar?-, necesitan utilizar la electricidad”, lo que tratan de impedir, células leninistas, “grupos minoritarios, pero muy activos e influyente (…) para frenar el desarrollo”, lo que, con insistencia, él llama “pogreso”.

Coda sobre civilización.- Abre el sinsorgo su nimio análisis del “bucle ecologista” diciendo que “los avances de la civilización -¡ahí es nada!- se han producido por la aplicación del ingenio humano para mejorar -pásmense del popurrí- la agricultura, la ganadería, las artes y, en suma, poner la naturaleza al servicio de las personas” y desde El Delirio Montañés -subrayo lo de “montañés”- pontifica al afirmar que “en Cantabria -no en La Montaña- asistimos a una verdadera campaña para impedir la creación de parques -¿infantiles, inanes?, ¡ay la perversión del lenguaje!- de energía eólica porque agreden -¿sólo?- el paisaje”. Por fortuna -algunos- aún sabemos que, Ortega dixit, “no es eso, no es eso”.

Don José Ortega y Gasset, no Manuel Ángel Castañeda

domingo, 13 de abril de 2025

Lo cotidiano.99 De la celebración Fernando Merodio 13/04/2025

Lo cotidiano.99

De la celebración

Fernando Merodio

13/04/2025

El pasado día 10, Miguel no subió directamente a mi casa para comentar lo último hecho y avanzar en nuestro único objetivo, que el voraz 1% no implante ni un solo molino en los montes de nuestro territorio, propiedad en mano común de vecinos y pueblos, no de la Administración, concejos, juntas, municipios, gobiernos,… y, a diferencia de todos, absolutamente todos los jueves no venía él solo desde Usánsolo, próximo a Bilbao donde trabaja como cartero rural, lo hacía con su mujer, en el coche de ella, dejando en su casa el fatigado monovolumen particular del trabajo en que viene siempre, llamándome, no lo hace nunca, desde Cuatro Caminos para decirme que dejara lo que estuviera haciendo y bajara a la entrada de mi casa en General Dávila, pues feliz, más que contento, quería invitarme, sin Rosa, a cenar, junto a su mujer, en un bonito restaurante en Guarnizo/Maliaño/Astillero. ¡Un lujo!

El Roto 12.04.2025

Lo que la Plataforma trata de evitar

¿Qué quería celebrar Miguel? Que el día 7 habían notificado a la Plataforma el primer fin/sentencia que, tras 15 años de fatigosa brega, ha asentado, de facto y en Derecho, que el cruel, gigante 1% no pueda plantar dañinos molinos, la primera sentencia de los muchos contencioso-administrativos que ha promovido contra -hace política- la feroz codicia depredadora del capital y, aunque hay quien no lo cree -la fe de los bobos- precedente de nada, ha ganado, pese a que el tribunal -sin duda errado- no haya entrado a valorar el resto de los numerosos, sólidos motivos de nulidad que ella ha alegado, pareciéndole bastante sancionar algo, ¡eso sí!, tan vital para -e ignorado por- la -que dicen- democracia, como es la falta de participación informada desde antes de iniciar el trámite administrativo, de modo que se determine la conveniencia o no de lo pretendido, en base al esencial Convenio de Aarhus y la española Ley 28/2006 que, incorporando las Directivas 2003/4/CE y 2003/35/CE, lo transcribe como garantía de vitales derechos de acceso a la información, a la participación pública y a la justicia gratuita en defensa del medio ambiente, Convenio y Ley en cuya difusión y exigencia  ha estado volcada los últimos 15 años la seria, eficaz Plataforma, chocando al andar con visiones tan ignaras, pútridas como la de aquel Director regional de Industria que, al exigírsele el cumplimiento de “Aarhus”, se limitó a preguntar: ¿quién es ese?

El Roto

Pretensión de los gigantes Iberdrolo, Edpo, Endeso,… y sus amos

La Plataforma habla de -y practica- la lucha del sabio, humano querer más pegado a la tierra de todos que hay que proteger frente al cruel, injusto, excesivo poder insano del capital mal acumulado, la iniciaron, hace 15 años, en un bello, -casi- deshabitado valle montañoso del sur de nuestro territorio regional y, justicia poética que aún existe en algún caso, la primera sentencia que niega al capital el derecho a plantar en tierra de todos gigantescas, dañinas infraestructuras eólicas que -con Bildu dejándome, el martes, estupefacto en una charla al justificar su necesidad con, como en todas sus turbias, funestas causas, demagogia- libra al municipio familiar de Miguel, Valdeprado del Río, donde un cacique/alcalde otorgaba hace años, contra los vecinos y con oposición de la Plataforma, una ilegal “compatibilidad urbanística” para, en la montaña ganadera y agrícola del sur, no criar vacas ni cultivar alimentos de la tierra, sino plantar agresivas, dañinas, gigantescas infraestructuras que permitirían al capital injustamente acumulado enriquecerse -aún más- generando innecesaria energía en un mundo que, agonizante, exige austeridad.

Coda sobre noticias que, pareciendo buenas, podrían ser malas o viceversa.-  Podría ser mala la sentencia, de apariencia tan buena, que -por falta de participación informada- prohíbe al gigante Edpo llenar de -también gigantes- aerogeneradores las montañas de Valdeprado. domicilio, junto a -entonces- otros muchos, de los ancestros de Miguel, por no valorar el resto de argumentos de la nulidad, como la falta de Evaluación Ambiental Estratégica de todas las solicitudes, el caótico, ilegal cúmulo de proyectos, no haber evaluado sus sinergias, daños en espacios protegidos o la conectividad,… y también podría ser anuncio de algo malo la inexacta valoración vacua realizada por el Tribunal al decir que “la ausencia de Evaluación Ambiental Estratégica (…) no puede ser achacada al Gobierno de Cantabria exclusivamente”, pues, aunque ello fuera cierto, la Ley y el TSJC y TS que declararon nulo el frustrado intento de regalar, de forma ilegal, 1400 Mw, mediante el llamado “concurso eólico”, taxativos exigen que, antes de autorizar la implantación industrial, hay que planificar y evaluar los impactos de lo planificado, lo que hoy, casi 15 años después, aún no se ha hecho, no debiendo, ilegalmente, “poner el carro delante de los bueyes”, mientras que en el lado opuesto, el de la noticia que, pudiendo parecer mala, es excelente, tenemos el -que alguien puede creer- triste informe de que noséqué academia de fútiles nadas no admita entre sus miembros a El Roto, lo que para mí -más que lógico- fue motivo de la enhorabuena que transmití, tras saberlo, a Andrés Rábago y Guadalupe, leyendo luego cómo Carlos Boyero en su “¿El Roto en alguna academia? No me joda” que, tras compararle -de algún modo- con Bartleby, el escribiente que “preferiría no hacerlo”, dice que: “Le basta con tener cotidianamente la admiración, la necesidad y el amor de tantos lectores que no creemos en casi nada. Miento. Sí creemos en usted, terapéutico, feroz y maravilloso El Roto”. En uno y otro caso, pues eso.

El Roto 11.04.2025

Y viceversa

Tanto por perversión del lenguaje como por el inmenso poder de la mano que mece la cuna

sábado, 5 de abril de 2025

Lo cotidiano.98 De gestas Fernando Merodio 05/04/2025

Lo cotidiano.98

De gestas

Fernando Merodio

05/04/2025

Empiezo a leer Calle Londres 38. Dos casos de impunidad: Pinochet en Inglaterra y un nazi en la Patagonia, documentada obra de Philippe Sands, jurista autor de las magníficas Calle Este Oeste y Ruta de escape, con las que tanto aprendí sobre la inestabilidad política/territorial en la zona que hoy -tan insegura- es Ucrania y lo valiosa que fue, tras el atropello nazi, la gestación por, ciudadanos de allí, Rafael Lemkin y Hersch Lauterpacht de, ideas esenciales similares, diferentes del Derecho Penal Internacional poco y pésimamente aplicadas en la práctica, como son las de crímenes contra la humanidad y genocidio, tres narraciones en las que, por encima del mal que narran, me fascina el número de -tan poco valoradas- gestas personales y sociales que, frente al grave daño y quienes lo causan, los canallas e ineptos arribistas de toda laña,… floreciendo en la lucha contra la evidente maldad.

Un vampiro, Vlad Tapes, Conde Drácula chileno, propiciador de gestas

De ello, sin necesitad de viajar a Ucrania, Chile,… o Palestina, ni remover, como ruín hace Sánchez, la insana locura de la cruel vieja posguerra, algunos españoles sabemos lo bastante para valorar, sin duda, las heroicas gestas -más recientes- de la infinita lista de encarcelados que defendieron una reconciliación libre e igualitaria, los ejecutados por nada, los detenidos por lo mismo, Julián Grimau, los torturados, los abogados/amigos de Atocha, Arturo Ruiz o Pedro, Romualdo, Francisco, José y Bienvenido, los cinco obreros muertos en Vitoria a tiros por la policía de aquel Fraga que antes -otra vez- nos había mentido: “La calle es mía”, siendo doloroso, por ello, tener que soportar la -falsa- historia reciente que escriben falsos ganadores en reseñas de su TV -del régimen-, identificando como parte de los que, de verdad, lucharon por la -que dicen- democracia ahora, lucha de la que incluso se benefició, inane heredera vanidosa, muy cómoda -como muchos de la PSOE- con el fascio, la derecha, la derechona eterna, relatos que alaban más que a la casi único organización combatiente, el PCE y aquellas Comisiones, su sindicato -entonces- de clase, que alumbró el tunel que fueron 40 años de vacaciones de UGT y la anticomunista PSOE, reaparecidos en forma de trileros sevillanos avalados por el servicio de inteligencia (¿) de Carrero Blanco y con el sucio dinero de la CIA y la fullera socialdemocracia alemana, base de lo de luego -la OTAN, la destrucción del tejido industrial, Filesa, Malesa, Time Export, Flick y Flock, los GAL, la cal viva,…-, germen del insufrible subvencionador de la zeta/ceja que, gótico hoy en familia, remolonea por Venezuela y “paraísos” limítrofes, hasta, en caída libre, acabar en la actual cloaca de Sánchez y sus inclasificables socios, los parásitos, rémoras que, alardeando de poder, sumar,… sin historia, ideas, ni principios, se limitan a cobrar por abonar y regar la finca del más sucio egoísmo patriotero independentista, desde su xenófoba extrema derecha hasta amigos -no contritos- de penados asesinos del tiro en la nuca y los ventajistas que cogen del suelo la fruta caída del agitado árbol de todos,... hasta el infinito

Así eran, igual que nosotros, Lola, (tiroteada en Atocha) y Arturo (asesinado por, ¡sí!, la policía)

No puedo evitar el recuerdo de Lola, alegre, guapa niña de 13 años, de sus dos parejas, primero Arturo y luego Javier, asesinados por el fascismo contra el que luchaban, de su permanente sonrisa en la boca que, en Atocha, destrozó un tiro y siento ganas de llorar. Para el Diccionario Enciclopédico Español, “gesta” es “un relato épico que narra las proezas  de un héroe en un contexto histórico”, refiriéndose “al conjunto de hazañas llevadas a cabo por un personaje o un pueblo, normalmente en orden a conseguir un objetivo importante” y añadiendo que “en general, se trata de hechos memorables” mientras para el de la RAE, del latín “gesta”, nombre femenino, son “hechos señalados, hazañas” y, en otro sentido, género popular, propio de la Edad Media que, ¡tiempos aquellos!, era recitado por juglares y trovadores, siendo ejemplo icónico el “Cantar del Mío Cid”, siendo cierto que lo hecho por aquella gente con “el caudillo” vivo, como tantas otras cosas, tiene relato sobre presentes y -en especial- ausentes, de real gesta, de la que no se habla porque no gusta al “progresismo” que, tras 40 años de vacaciones, hoy se aprovecha de las fatigas de aquellos.

Coda/amenaza.- Siempre El Roto, esta vez su denuncia del uso -con más intención, seguro, que criticar la mera sintaxis- de frases subordinadas -que yo empleo- por periodistas, que son bobos  -y otras cosas- escribidores para que otros -aún más- bobos entiendan lo que ellos quieran, crítica que -consciente como soy de mi difícil prosa, cuya lectura intento facilitar con -gran- adjetivación, me invita a hacer un esfuerzo y, a punto de entrar -lo haré el día 14- en el tramo cronológico 80 del camino que hago al andar, quiero -iluso- escribir un -primer- libro con -quizás, no estoy seguro- menos frases subordinadas y -más probable- también menos adjetivos que mis escritos más cortos sobre gestas cotidianas recientes, muchas, de que he sido feliz actor/testigo, acaso menos heroicas que las de la lucha, con pocas expectativas de éxito, contra el peligroso fascismo, pero igual de nucleares -si no más- que ellas, como son, evidentes, las vinculadas a la vital pelea diaria por el modo, el quién, el para qué,… del vital control de la generación y uso de la energía, para lo que hurgaré -en extenso- en mi ya viejo pasado junto al sr. Merodio y doña Gloria en Rozadío, pegado al feroz y feraz rio Nansa, luego en los peculiares rivales que tuvo REE al castigar con la injustificable -e injustificada, aún inactiva- cancerígena LAT a 400 kV Soto de Ribera-Penagos-Güeñes Itxaso y, ahora, asombrado por las imponentes, increíbles victorias de unos –muy- pocos, muy bragados sobre el más cruel 1% que, aquí con el apoyo -en medio de tenaces ridículos- de esa cosa que dicen El Delirio Montañes, propiedad del sucio capital internacional, y facilitado por la incuria política de la Administración intenta robar -para destruirlos- los montes propiedad en mano común de los vecinos e implantar -y lucrarse con- superfluas, dañinas mega-infraestructuras eólicas, remedo de los gigantes contra los que peleó -imprescindible- don Quijote.

El Roto 28.03.2025

Quiero suponer -lo sé- que lo de la subordinación en el periodismo tiene segundas