Lo cotidiano.45
Depender
Fernando
Merodio
30/03/2024
Evito
con rechazo la cursi idea posmoderna -para Habermas, lo posmoderno es
antimoderno, conservador, reponedor- que dicen “dependencia emocional”, enfermiza necesidad de cariño constante de
alguien o a algo concreto que, sin un crítico análisis previo, daña bienestar y
vida social a medio y largo plazo, al poner a la persona, hábito o cosa de que
se depende por encima de lo esencial de nuestra propia vida, dependencia menos individualista,
más abstracta que la sicológica que suele nacer de baja autoestima, abusos previos,
falta de habilidad social, presiones,…, si bien hoy se entiende por depender algo
tan elemental como necesitar protección y ayuda o que ocurra un hecho o
aparezca en su auxilio una persona ajena a quien lo necesita, lo que el actual populismo
progresista, aficionado a prohibir y exigir, simula reglar legalmente con imposibles,
falsas, vacuas “normas para la dependencia”, propias del Estado de malestar a que, pues conviene al
capital, nos ha conducido tan leve, líquida, “progresista clase media”.
Envidiable
potrillo recién nacido
Se ve hasta qué punto
llega a depender el animal humano al comparar nuestros primeros meses -no horas
o días- de vida con los minutos que sin casi ayuda de nadie para acceder a su
libertad natural precisa, por ejemplo, un potrillo, comparación que, pienso, habrá
generado sesudos análisis, que me son ajenos, sobre cómo explicar los motivos
de que, viéndonos tan superiores y sabios, seamos tan poca cosa al nacer, hasta
el punto de que, si nos dejan abandonados, (sobre)vivimos -solo- segundos, pese
a lo cual, tratamos de “humanizar” lo
irracional con chubasqueros, botas… y, por supuesto, ataduras que imponemos,
por ejemplo, a mimados/pobres perros.
Patética/ridícula humanización
Volviendo
al depender humano, vemos como, sin que haya sido preciso pedir que nadie me
proteja o ayude, estoy forzado a sufrir, aquí ahora, las tropelías -de troupes- de demediados que, al dictado coyuntural
de, uno más lejos que la otra, esos Sánchez el Malo y Sáenz de Buruaga la Rala,
de poco denso espesor, actúan como quieren y, enviciados, osan incluso cobrar por
ello lo que nunca antes ganaron, algo que, siendo muy grave, no es lo peor pues
es cosa de la política, que afecta a todos y se pueden -levemente- aliviar sus
efectos cambiando al que, dictador, manda en sus mercantiles troupes,
Pegunta globalmente aplicable a la situación actual
Es más
grave y tiene peor solución lo individual concreto, un ejemplo, lo de Rosa, 58
de sus 77 años conmigo, camarada sana hasta que el cruel deterioro cognitivo frontotemporal
nos trajo -excelente libro de Dasha Kiper- diarios “viajes a tierras inimaginables”, que a la mercantil ciencia -lo
mismo que acumular la energía generada- no interesan, haciendo a Rosa depender
del auxilio que, hoy, tiene y, frente a lo que graznan las/los “progresistas chelis”, no es prestado por
otra mujer.
Y si tal
auxilio fallara, ¿qué sería de Rosa? ¿iría a uno de los “asilos” denigrados por quienes dejan a sus mayores en ellos? Millón
y medio de españoles, el 3%, depende y acude a diario al “sistema de atención a la dependencia” público, que, dicen
dedica -yo no creo que tanto- a ese 3% el 0,7% del PIB, menos de la mitad que
la media de la OCDE, siendo la
realidad que Rosa recibe, como toda ayuda económica y/o personal del ICASS, una pensión de 455,40 €/mes para que
pague el auxilio que recibe -¿cubre la SS?- y si la inmediata respuesta a la
exigencia de incoar un expediente al director del ICASS y la concejala ratifica por escrito el exabrupto verbal de que
no es compatible con ninguna otra “atención
a la dependencia”, quien auxilia a Rosa podrá pensar con tales datos -y
actuar- sobre lo que en la pobre “progresista”
España que amnistía a caros canallas, significa depender.
Coda
para resistentes.- Ya que todos dependemos, es bueno saber que quien piense que
al resistir/reclamar pierde tiempo se equivoca, como lo acredita que la
reclamación/protesta de dos y el del tambor ha hecho que el capital lleve 15
años sin implantar ni un tóxico molino
eólico en todo el territorio regional.