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sábado, 15 de enero de 2022

202 Los domingos cavilar Sobre los métodos del terror Fernando Merodio 16/01/2022

 202 Los domingos cavilar

Sobre los métodos del terror

Fernando Merodio

16/01/2022

“Creo que fue Kant quien ya advirtió contra eso: “Nunca discutas con un idiota: la gente podría no notar la diferencia”. Sin embargo, a veces es inevitable desoír ese consejo, por ejemplo cuando los grandes imbéciles te están matando” (Javier Marías. “Asesinos memos”)

1. Hace años, un grupo de pensadores reunidos en Madrid acordó que vivimos tiempos de lenguaje pervertido, que conceptos muy usuales con evidencia clara -paz, libertad, progreso, cultura,...-, significan cosas muy diferentes para personas distintas, incluso para la misma persona en situaciones desiguales, que ello dificulta, imposibilita la eficacia de debate y acuerdo sobre las cuestiones de interés general a que afectan tales conceptos y que, también por ello, para saber de qué hablamos y ser eficaces, estamos obligados a lo que Jacques Derrida llamó “deconstruir” el lenguaje.

2. Un ejemplo muy relevante y actual es el torticero uso mediático y político del concepto "terror", que el Diccionario de la Lengua Española identifica como miedo muy intenso o, también, como persona o cosa que lo produce.

3. Con Robespierre y la Revolución Francesa se identificó "terror" con método de acción con un fin político concreto, siendo hoy uno de esos conceptos cuyo alcance y significado exige, si queremos que sea realmente posible discutir, controlar, valorar,... objetiva y eficazmente sus muy importantes efectos políticos, sociales, culturales, jurídicos,..., la máxima precisión

4. Sociopolíticamente, el egoísmo hace que (pre)ocupe el uso por el otro -no por nosotros- de los métodos y estrategias del "terror" con fines de dominación, una (pre)ocupación que espanta en especial cuando se desconocen sus objetivos reales, llevando, habitualmente, a una crítica/solución egoísta, maniquea para el problema: el malo es el otro y nosotros, siempre, los buenos.

5. Las estrategias utilizadas en los distintos métodos del "terror" son, hoy, muy difusas, oscuras y su motor/cabeza puede estar en los lugares más insospechados.

6. El "terror" opera fundamentalmente sobre indeterminados -incluso indeterminables- riesgos futuros vinculados a hecho o hechos pasados, presentes o futuros que lo desencadenan, siendo la objetividad y alcance de sus riesgos, supuestos o reales, lo que hay que valorar para, correctamente, diagnosticar  y tratar el "terror" en cada caso.

7. Hoy, el análisis de los métodos del "terror" tiende a vincular este, de modo casi exclusivo, a una violencia física de origen bastardo, que ejerce el otro contra nosotros, lo que genera fobias irracionales, llegando terror y fobias a fundirse en una sola cosa, lo que hace afirmar a Rafael Argullol que vivimos en un mundo de sospechas que alimentan eficazmente el miedo, siendo su comprensión nuestra mayor fuente de seguridad, lo que exige “viajar, salir de nosotros, para mirarnos”.

EL ROTO 22 /06/2021

8. Es innegable que, además de la violencia física ajena de origen indeterminado que provoca una fácil, demagógica y peligrosa exacerbación de la sensibilidad social, existen otras formas de violencia que están en el origen de muy diferentes "terrores" usados como métodos de acción, siempre fraudulentos.

9. La preocupación -obsesiva- por el "terror" que nace de la violencia física es debida, con toda seguridad, a que su ejercicio solamente exige, en la mayoría de los casos, voluntad de hacerlo y está al alcance de todos, igualándonos, mientras el ejercicio de otras violencias menos repudiadas socialmente pero igualmente generadoras de "terror" en quienes las sufren, solamente está al alcance de la minoría que ocupa el ámbito de las distintas formas del poder: económico, político, religioso,...

10. Son poderes que, al manejar a su conveniencia las potencialidades del "terror" que causan sus hechos, agravan o debilitan voluntariamente el mismo.

11. Los campos de exterminio nazi, estalinista o yanqui, la represión franquista, el napalm, los bombardeos de Hiroshima y Nagasaki,... son ejemplos recientes, ciertos de "terror" violento e injusto generado desde el espurio poder consentido.

12. La injusticia, la enorme, inadmisible desigualdad socioeconómica, el trabajo con salario injusto y precario, la deslocalización,... son, entre otros medios, muestras del miedo, el "terror" como método para violentar voluntades y forzar de modo irresistible las pautas de quienes lo sufren, solo en beneficio de quienes, dolosamente, lo generan a partir del poder que les otorga una injusta superioridad económica, militar/policial, social, política,... y la práctica inexistencia de un sólido reproche -organización- social, lo que genera miedo intenso, "terror" en las vidas de los afectados y sus ámbitos.

EL ROTO 19/03/2021

13. Las religiones, aquí la católica, han sido doctrinal e ideológicamente armas para perpetrar los atropellos del "terror", incluso matanzas -bíblicas, el llamado holocausto nazi, Bin Laden,...-, como modo de represión que genera "terror" con fines ciertos, ajenos a los religiosos -la Inquisición es un buen ejemplo-, permitiendo decir a Antonio Elorza que, quizás, la única fe que no justificó la violencia y el terror fue la de Grecia, donde, en cuya irracional creencia “los dioses habían de amoldar su conducta y someterse al juicio de la razón humana”.

14. Igual que no existe causa estrictamente lógica, racional que explique por qué se da tan distinta importancia a las diferentes formas y métodos del "terror", tampoco existe la que explique cómo es posible que determinados hechos tenidos por cotidianos -las muertes en accidentes de tráfico, el abuso laboral o los efectos de la antropogénica destrucción ambiental -que sus defensores llaman "progreso"- no nos generen un miedo muy intenso, un "terror" como el que se causa desde el poder, provocado libre y voluntariamente para aumentar los efectos causados en las personas por hechos con potencialidad de causarlo.

15. La respuesta política, social, jurídica, económica, diplomática, militar,... que han generado -y hoy generan- los distintos métodos del "terror" se muestra inane al identificar, en especial los políticos profesionales, el problema -solo- con nuestro miedo concreto, de modo ficticio, ineficaz, injusto, al ser necesario, exigible un elaborado análisis, razón, respuesta filosófica a los problemas del terror, pues dijo Leonardo da Vinci que “la práctica siempre debe ser edificada sobre la buena teoría”.

16. Para Giovanna Borradori, es objetivo esencial del fatigoso pensar filosófico aportar ideas contra la opresión y el miedo, recuperar la confianza en nosotros y mejorar nuestra condición material, política y cultural, lo que no conseguiremos culpando al otro, en lugar de fatigarnos rastreando en el legado de la Ilustración en urgente busca de una perspectiva crítica a partir de un riguroso examen de nosotros mismos”.

17. Alarmante coda triste sobre la situación actual.- Esta cosa -al tiempo artificial y cierta- que dicen Covid19 nos tiene inmersos en un pastoso, desusado caldo de recelo, aprensión, desconfianza, incluso temor, espanto, pánico,... que generaliza un injustificado estado de miedo muy intenso, incrustado en la sociedad como angustioso trastorno del ánimo a partir de un riesgo -que, insisto, veo- irreal y que, tras burlar el frágil control de la lógica, genera perturbaciones tan patológicas como la que Flavia Álvarez-Pedrosa Pruvost, Flavita Banana, joven ilustradora, dibujante asturiana, refleja en su viñeta del diario El País -de lo poco que en él se salva, junto a El Roto- del día 14/01/2022, en la que un grupo de niños celebra una fiesta con sus progenitores o enseñantes y, al entregarlos estos un cucurucho para que se lo pongan -como han hecho siempre y ejemplifican esos mayores- en la cabeza, los chiquillos se lo incrustan en nariz y boca -tal es la perturbación intensa/extensa que generan en ellos capital, políticos, medios,...- al modo de una de las -costosas- mascarillas puntiagudas que, engolado siempre, gusta exhibir Sánchez ¿Será eso de los niños, acaso, el "terror"?

FLAVITA BANANA 14/01/2022

domingo, 31 de enero de 2021

152 Los domingos, cavilar Próstata, virus y genocidio Fernando Merodio 31/01/2021

152 Los domingos, cavilar

Próstata, virus y genocidio

Fernando Merodio

31/01/2021

"La pequeña población se halla en medio de una gran llanura (...) Comienza con pequeñas chozas y termina con ellas. Al poco las chozas son reemplazadas por casas. Empiezan las calles. Una discurre de norte a sur; la otra de este a oeste" (Joseph Roth "Judíos errantes")

"El ser humano individual (...) es la unidad última de todo el Derecho" (Hersch Lauterpacht)

"Los ataques a grupos nacionales, religiosos o étnicos deberían pasar a considerarse delitos internacionales" (Rafael Lemkin)

Según los libros la próstata es una glándula de secreción externa del hombre, del tamaño de una castaña, forma de cono de vértice superior, situada en la pelvis detrás de la sínfisis púbica, delante del recto, bajo la vejiga de la orina, que, a partir de la pubertad, elabora y segrega el jugo prostático, licor que al eyacular mezcla con espermatozoides generados por las vesículas seminales, lo que, incluso mal sabido, suena serio, en especial cuando conocemos que, junto al agrado, llegados a una cierta edad apareja riesgo real de cáncer, no tan malo para el atorrante "progreso" feminista como el ubicuo de mama que sufren, totalitarias, injustamente sobre-protegidas, algunas mujeres, un riesgo, aquel cáncer, que para mí, hace años, devino en grave, real pues, con apariencia aun sana, me pesaron más, dicen, los genes del abuelo materno muerto de ese mal en 1963, sin hospital, entre dolores y gritos, haciendo que alguien, cruel y estúpido, lo atribuyera a castigo semi-divino, por su afición a la -casi- siempre grata práctica sexual, lo que unido a haber causado también la muerte de mi hermano menor y pese al éxito médico de mi grave, larga operación, emborronado por un nocivo, infrecuente síndrome compartimental, suelo vincular la cuestión individual de tan seria glándula a hechos, reflexiones y cosas importantes del animal pensante.

No olvido la desapacible sensación que, ya antes de mi pelea con las cancerosas células, la dificultad para orinar, la sonda y demás problemas, tuve hace tiempo al leer un artículo de Muñoz Molina -por mí ponderado en otras cosas, no en su querencia al calor de establo, al refugio en tablas que, a toda su familia, facilita el grupo Prisa-, en el que, con crueldad en la que percibí mala ideología, decía de Nathan Zuckerman, alter ego de Philip Roth en sus relatos, tras ser operado de próstata, que “el sátiro temerario de tantas novelas ahora es un eunuco; el varón arrogante y enérgico tiene que cambiarse varias veces al día de pañal para no oler a meado”, algo irreal, brutal conclusión, alejada de la realidad, sin duda por diferencias insalvables entre su cultura diaria -acaso- sexual y la de Roth/Zuckerman, tan vitalmente dispares, afirmando que quien “parecía prometer la gratificación universal y la juventud ilimitada, descubre con estupor y rabia que le ha llegado la vejez y que delante de sí, igual que a su alrededor, no tiene mucha más perspectiva que la enfermedad y la muerte”; descripción que provocaba mi desagrado, enojo, incluso cólera, al incluir hipótesis sobre la vida del autor, concluyendo que, tal vez, habría transmitido a Zuckerman “también su furia y su experiencia de la enfermedad”, lo que me obligó pensar que, sin duda, lo envidiaba.


EL ROTO 19/11/2020

No parece que el granadino, 65 años hoy, hubiera leído Patrimonio, el individuo en difícil grupo mínimo, el familiar, la turbadora relación descrita por Roth a los 58, él enfermo y su padre en dolorido ocaso, la forma en que lo describe y cómo limpia sus incontenibles excrementos; el modo de hacerlo -“estaba bien y era lo que tenía que ser”- definía su real, más valioso, quizás, patrimonio y, si lo leyó, no lo entendió, siendo inexplicable que le califique de sátiro arrogante y le lance tarascadas, usuales en el -falso- mundo cabal de la SER y El País, controlado por quienes ocupan lugar privilegiado en la formación de una dañina "opinión pública", (ab)usan (d)el poder en un medio que calla, tapa porque le interesa, la corrupta gestión política del interés general, de lo colectivo, tarea en la que, en este caso, él lanza homilías, insisto en que quizás con envidia, contra la intransigente posición sexual del serio novelista judío y el modo en que, voluntariamente, disfrutó libre los fluidos de sus vesículas seminales.

Es lo de Muñoz Molina reflejo, cierto, del miedo -asentado ahora dañino en lo colectivo usando un mínimo manipulado bichito- un miedo que Manuel Cruz, filósofo de andanza triste en la PSOE, casi al tiempo integrado/expulsado de la acción política, identificaba no con temor al otro sino “a lo que de nosotros vemos en él”, definido hoy por lo que, en influyentes, cómodos ambientes, consideran correcto, ámbitos en los que en el tumor maligno vinculado a los genes y, dicen, también a algún insano hábito de vida- las células crecen libres, autónomas, fuera del orden fijado y, egoístamente, invaden lo vecino intentando apoderarse de ello, permitiendo construir feas metáforas de cómo, igual que el tumor nos invade uno a uno, la mala política se adueña de todos, de nuestra vida social so pretexto de una falsa seguridad, ocupándola violenta, privándonos de necesaria libertad, perjudicándonos sin valorar que, explica Spinoza en Tractatus Políticus, mientras la única virtud del Estado es la seguridad, la libertad de espíritu o fortaleza de ánimo es, sin duda, una virtud privada”; conflicto individuo-colectivo muy dañino, pues, igual que las células cancerosas invaden el cuerpo físico y dañan su actividad, los actos administrativos -y los judiciales- disfrazados de política en la empantanada ciénaga actual, con un aquí ahora ajeno a revoluciones o cambios reales, -malos- profesionales asalariados muy caros aprovechan el mínimo virus del que no explican -¿saben?- nada, excediendo su estricto ámbito administrativo/judicial, condicionando lo privado para, sin que razón alguna lo justifique e, insisto, so pretexto de falsa seguridad, llenarnos de inseguridades, limitaciones y conflictos personales.



EL ROTO 01/12/2020

El individuo, su próstata, jugos, licores, vesículas seminales, el uso que de todo ello hacemos, su degradación por la vida, lo que significa, ha de tratarse -lo (pre)siento- con la seriedad del que sabe, como Philip Roth en sus libros, con mucho más recato del que Muñoz Molina -hispano- (de)muestra, siendo serios, con un saber teórico y real libre y una práctica precisa, sin prejuicios, nacida como aquel saber, del pensar que fatiga la mente y el querer leer, leer, entender lo leído y, luego, actuar, propio del individuo que, si somos serios, evita la corrupción social que inoculan las -a cada cual peor- políticas -de políticos- educativas; el gozoso uso libre de los jugos que tanto parece molestar -¿lo envidia?- a Muñoz Molina y su ruina con el paso del tiempo -¿del que se alegra?- nos llevan a una sería idea, a la libertad sin trabas en las reflexiones de Fernando Savater sobre el libertinaje individual privado, negado en la España eterna, farisaica, totalitaria cada día más, hoy dañada por progres y -malas- feministas, un libertinaje que, lejos de contrariar “las exigencias de la convivencia general”, precisas “para armonizar la libertad de todos”, las potencia.

Vinculado tanto a la seria espirituosidad de la próstata -del griego, prostátés, "que está delante", "protector", "guardián"- como a la irritación que me genera que, en eso, llegara -no Fidel- un mínimo, útil virus que, copiando la insana estrategia de los desarreglos glandulares, con la firme ayuda totalitaria del capital, la policía y los "políticos" de la "ley mordaza", ordenó a todos parar… y -casi todos- paramos, me he enganchado a la lectura de "Calle Este-Oeste. Sobre los orígenes de 'genocidio' y 'crímenes contra la humanidad", de Philippe Sands, jurista que regresó a sus orígenes, a su abuelo, Leon Buchholz, judío militante en los duros años de sozialismo nazional, a su ciudad natal, Lemberg, Lviv, Lvov, Lwów, que cambia de nombre y país, Polonia, Austria, Alemania, Galitzia, Ucrania, según quien decide, cambios que destrozaban individuos al marcial paso nazi, como hoy, con leves gradaciones, al gusto de los inventores de idiotas naciones de naciones, esenciales patrias -contra la unidad del género humano- y encuentro a Hersch Lauterpacht y Rafael Lemkin, pioneros del derecho de gentes que, partiendo uno desde el individuo, la próstata, y el otro, desde los grupos, el manipulado, mínimo virus, acuñaron dos esenciales conceptos que habrá que atender: los "crímenes contra la humanidad", reconocido en el juicio de Nürnberg y la Resolución 95 de la ONU y el "genocidio", que recogió la Resolución 96. 



EL ROTO 30/12/2020

domingo, 4 de octubre de 2020

125 Los domingos, cavilar 40 Covilación Resistir como Madrid Fernando Merodio 04/10/2020

 125 Los domingos, cavilar

40 Covilación

Resistir como Madrid

Fernando Merodio

04/10/2020

 “Resistir no significa solo negarse a aceptar la absurda imagen del mundo que se nos da, sino también denunciarla. Y cuando el infierno es denunciado desde dentro, deja de ser infierno. (...) El carácter armado del ¡aquí estamos! de los indígenas zapatistas no les importa. Lo que importa y molesta es (...) su existencia misma”. (John Berger “El tamaño de una bolsa”)

Chirría el trato que el resiliente pueblo madrileño, robusta aleación de ciudadanos del mundo entero, recibe de su gobierno más próximo, ahora esa derecha alterada por los seísmos de su sistémica corrupción de siempre como, en especial, del "sanchista" gobierno de España, liga de intereses “populista/progresistas” de la que, Félix de Azúa dice que destaca por ser realmente aciago en la lucha contra el virus, la corrupción, la pobreza,…, salvo si se la compara con Brasil, Venezuela, Argentina, Haití, México,…

En la extraña y cara inutilidad que es la titulada universidad de verano que lleva el nombre del insólito polígrafo neurótico que bebía aguardiente al tiempo de inventariar heterodoxos españoles, ¡si levantara la cabeza!, José Luis Sampedro, que acumuló casi cien años de saber con coraje, decía que “la literatura tiene que ver con el arte de vivir, mientras la ciencia sabe mucho de haceres -excepto del virus numerado- pero no de fines” y, literato, advertía que “la omisión es acción y cuando callamos aceptamos”.

(Breve acotación al margen. Admirando al economista /humanista, de noche, en fin de semana releo con gozo lo que, al hilo del 11-S, dejó escrito sobre una deliciosa -¿y perversa?- relación tenida, con más de 70 años, mientras fisgaba en librerías de sexo, con una sádica culta “mistress” en St. Mark’s Place, en el colorista y desaliñado East Village, New York, ciudad que tiene “toda la iridiscencia de los principios del mundo”).

Vuelvo a lo de la resistencia de Madrid y recuerdo que John Berger, marxista, autor de “Puerca tierra”, muerto nonagenario potente como Sampedro, en un absolutamente recomendable hermoso libro se ocupaba con fatiga en lo que crípticamente llamaba "El tamaño de una bolsa", aclarando a inquietos, ya en la contraportada, que “la bolsa es una pequeña bolsa de resistentes” que “se forma cuando dos o más personas se ponen de acuerdo y se unen” para hablar de cosas serias, del poder, de historia, de sexo, de arte,..., pues ese “intercambio refuerza inesperadamente nuestra convicción de que lo que está sucediendo hoy en el mundo es perverso y las explicaciones que se nos suelen ofrecer al respecto son un montón de mentiras”, enfatizando que escribía con la “mayor sensación de urgencia”; motivos hay, cada día más, para ello.

Meditaba sobre resistentes, dialogaba/escribía de cosas diversas, con apariencia hermética, pienso que sugerente, sobre Miguel Angel y lo contrario a un nacimiento, Rembrandt y los abrazos, Van Gogh, su corta vida y el riesgo de perderse, Brancusi  y sus “besos”, ¡cuánta verdad hay en el sugerente, cerrado y áspero “beso” de su tumba en Montparnasse!, Diego Rivera, Frida Kahlo y su lance amoroso con Trotski, la belleza, el dolor, el suicidio, el comunismo, el “Viva La Vida” de su último cuadro,...; luchaba contra la gran derrota del mundo, cruzaba ideas escritas con el subcomandante Marcos y concluía que igual el águila que la garza, el campesino europeo al intentar no ser abatido por el capital que los indígenas de todo el mundo enfrentados a sus asesinos, lo mismo el pausado vuelo de la escritura que la heroica resistencia armada de Marcos o las reflexiones sobre temas de aspecto impenetrable, al compartirse, hacen que la serpiente se estremezca en la caverna, tema el mañana.

En la caverna del reptil no hay razón humana, ni sexo libre y feliz, ni cultura o arte ajeno a fundaciones para evadir impuestos, ni águilas, ni garzas, ni campesinos, indígenas, poetas,…; allí hay riqueza material, mares de sucio dinero robado, baldío, cuentas de resultados, fusiones, absorciones, compras de otros, agio con la desdicha ajena, crimen y guerra, desigualdades, hambre y, ahora, "progresistas/populistas" que califican el excesivo virus con número, no de amenaza, de “oportunidad” para acelerar, dicen, la transición a un mundo diferente… en el que seguirían mandando sus amos.


EL ROTO 23/09/2020

Sí se sabe en la gruta de lo que, lenguaje pervertido, dicen progreso y es ruina de nuestro medio ambiente, el de nuestros hijos y nietos y, si llegaran, el de los hijos de estos, causada por los que trafican con aerogeneradores gigantes mortíferos para la vida en montañas y valles, líneas de alta tensión y subestaciones hasta las ciudades, coches cegando calles y carreteras, aceras llenas de bicis, patinetes y skates,..., tal es el progreso que chivatos voceros como M.A. Castañeda patrocinan, al tiempo que nos pretenden condenar a ser, todos, camareros, vivir del turismo, puertos deportivos, campos de golf, planes para (des)ordenar el ordenado y bello litoral legado por los mayores,...; se sabe que todo son sucios papeles viejos -y ahora cabalísticos trámites fáciles con destructivos smartphones- ¡ruinoso y cruel dinero! vigilado por fieles siervos que aquí adquieren la dominante fea forma de la carcasa de un banco y la injusta omnipresencia destructiva pueblerina de un panfleto, un Delirio que premia y castiga a diario y deja claro qué es progreso... para ellos, para su consejo de administración.

La vieja y culta Europa -a la que nosotros, ignaros, nos opusimos en aquella guerra de la independencia- se ha rendido a esa caverna y no hay obreros que, tras fatigarse, exijan cobrar el salario decidido por sus explotadores, ni clases, sí capital, burócratas, pensionistas y funcionaros quejosos inactivos y restos de la vieja esclavitud atrapados entre las ruinas del naufragio, con subvencionadas, burocráticas castas políticas, sociales, ciudadanas, ambientales,... y gobiernos que, gestores (in)fieles, aguardan las migajas que, desde arriba, les tiran las constructoras, energéticas, bancos,... que les pasaron por encima, aplastaron, laminaron; casi no hay trabajo ni sueldos, todos deslocalizados, al tiempo que intelectuales orgánicos como Otegui, Puigdemont, Rufián,..., sabidos demócratas izquierdistas de Cataluña y Euskadi quieren cambiar sus mínimos votos por la panacea de la mirífica ansia nazional asesina,...; productores baratos y gastadores caros, estamos acomodados, privados de saber, lealtad, sexo, vida,... y su oportuno, oscuro virus es la puntilla que nos deja sin nada de lo que, usado con el personal libre albedrío de cada cual, nos permitiría enfrentarnos al poder, a ellos. ¿La alternativa? Difícil, muy difícil. Jean-Paul Sartre y Hoederer, las “manos sucias”, piensan que “la revolución no es asunto de mérito, sino de eficacia, y no hay cielo” -¿se enterará "Evita" Iglesias, asustadiza “rata” que ahora copia el moño a mi abuela Agustina, mujer del ferroviario Fernando?-, piden militancia, lucha entre fines y medios, “reconciliación por aniquilamiento del adversario”, no “progresistas” pactos; esto es la guerra y la caverna -hay ya que señalarla- lo ha hecho, lo hace y lo hará siempre, pero sé que para el hombre y su conciencia es difícil. Yo no dudo, pero… ¡uf!

Antonio Gades, resistente a su modo, dijo que “no perdonan a Cuba que no haya claudicado frente al país más poderoso de la tierra”, no les asustan sus armas o su fuerza, solo ven falta de libertad y pobreza, ¡no dinero!, pero les molesta notar país y pueblo, y, sobre todo, saberlo, ver su admirable dignidad resistente que, con lacras y defectos, son como el águila y la garza, los indígenas y campesinos de todo el mundo, las palabras, las armas, el arte, el sexo, Berger frente a la serpiente en su caverna, por lo que, molestos y con prisa sin pausa, debiéramos reunirnos, hablar, hacer crecer bolsas de resistentes; en la insana ridícula España cobarde de las mascarillas, urge.

Acabé ya de leer "Telefónica", de Ilsa Kulcsar, mujer de Arturo Barea, censora de la prensa extranjera en Madrid, 1937/38, socialista-comunista que se salvó de milagro de un "paseo" anarquista y habla -sin ira- de la hoy venerada "república" que, al huir a Valencia, abandonó al pueblo madrileño y le obligó a tener que, diferente, resistir solo hasta el final, 1939, a Franco y sus "moros": "¿Aviones de maniobras o la fuerza aérea? Aquí tienen tiempo de formar a los pilotos porque Madrid ha resistido hasta ayer, no se rindió -como otros- hace dos años y medio", 29 marzo 1939. Resistieron.

EL ROTO 22/09/2020

domingo, 20 de septiembre de 2020

123 Los domingos, cavilar 38 Covilación Memoria democrática Fernando Merodio 20/09/2020

 123 Los domingos, cavilar

38 Covilación

Memoria democrática

Fernando Merodio

20/09/2020

Pronto no se entenderá cómo fue. Surgirán leyendas que ocultarán a los hombres vivos que no quisieron someterse y no se entregaron porque no les parecía justo. (…)  Quiero intentar hacer vivir a estas personas, no la verdad oficial sino la verdad interior de todos nosotros (…)  (Ilsa Barea-Kulcsar. “En lugar de una dedicatoria” del libro “Telefónica")

"Sé que he perdido tantas cosas que no podría contarlas y (...) ahora son lo que es mío (...) Sólo el que ha muerto es nuestro, sólo es nuestro lo que perdimos (...) Nuestras son las mujeres que nos dejaron, (…). No hay otros paraísos que los paraísos perdidos". (Jorge Luis Borges."Posesión del ayer" de "Los conjurados".


EL ROTO 19/09/2020

Ayer sábado, al tiempo que El Roto dejaba dicho algo tan obvio y amenazador como que "hay indicios de que el virus también se contagia por los medios", Daniel Gascón se afanaba husmeando alguna -mala- utilidad actual a la Guerra (in)Civil y la dictadura y abría su opinión constatando que cuando las Cortes Generales se han rendido -seis meses sin casi legislar- al turbio arbitrio del decreto-ley, los muertos -parte importante, por la desidia y el caos de nuestra "heroica", quejica y bien dotada Sanidad- han superado en un 25% lo habitual y la objetiva/técnica Funcas nos augura una caída del PIB del 13%, los peores datos de Occidente, el gobierno -que nos hemos ganado- pone tal guerra y dictadura de hace decenas de años en primera fila legislativa.

Si la "memoria histórica" siempre me pareció, quizás sin razón, una contradicción y que quienes la usan la trufan con falacias, la "memoria democrática", aún peor, me sugiere intento -con visos de éxito- de hablar de algo que no piensan que exista, un mero recuerdo, el paraíso perdido de Borges en el que no se cree, ajeno a la realidad, invento de canallas eternos, intento de, como escribió Ilsa Kulcsar -mujer de Arturo Barea, el que en "La forja de un rebelde" destacó como nota del carácter de Franco la de ser el único general que en África se atrevía marchar al frente de sus soldados,... que le odiaban pero no se atrevían ni a dispararle por la espalda-, pasados más de 80 años, abusar de que ya "no se entiende cómo fue" aquella guerra, -es mejor que no sepamos- lo que hizo cada cual durante la dictadura y además han nacido "leyendas que ocultan a los hombres vivos que no quisieron someterse y no se entregaron porque no les parecía justo", lo que nos permite seguir olvidando que fue Madrid, su pueblo abandonado por una "república" huida a Valencia, el que frenó a Franco y sus moros hasta marzo de 1939, mientras los valientes gudaris vascos, padres de la heroica ETA y Otegui, se rendían en Santoña a principios de 1937. Memoria.

Para unos pocos, capital y siervos, ha sido -siempre es- muy fácil influir, manipular la realidad, usar la descarnada mentira en su beneficio, (ab)usar del constitucional derecho -de todos- a la información, lo que obliga a cavilar sobre lo que es la extraña "memoria democrática", sin la mínima conexión que permita elaborar el silogismo entre las premisas y la conclusión -qué ocurrió entre los años 30 y 70, qué sucede hoy y hablar de democracia-, obligando a los "progresistas" a tachar de “negacionismo” -un personaje de El Roto explica, “yo digo a todo que , para que no me llamen negacionista”- no acatar sumiso la visión maniquea, parcial que la reciente mercantil Sánchez, Iglesias & Co pretende dar de esos odiosos años de plomo de nuestra -no tan- reciente historia, que ellos pretenden cerrar mal, vejando al enojoso "rechazo a aceptar una realidad -para ellos- empíricamente verificable", su falaz verdad.


EL ROTO 18/09/2020

Freud no tiene una teoría específica sobre la memoria, valor muy útil para quienes la controlan, aunque sí es un concepto presente en toda su obra al que, como Marx y Nietzsche en sus materias, aplicó un análisis filosófico, económico, político,... y, pues su base está en la biología neuronal, vinculada al deseo humano, sabe que genera asociaciones, pulsiones, bloqueos,... que hacen difícil su análisis, afectado por hechos vividos, fantasías y represiones subconscientes,..., nuestro desarrollo libidinal.

Memoria y nostalgia van sólidamente unidas de modo que no tenía por qué ser negativo, pero dado que para recordar sus hechos cada cual tiene que hurgar en el caótico espacio en que, a su conveniencia, acaldó lo vivido, sujeto a intereses y limitaciones personales, vayan ustedes a saber cuál es esa "democracia" que quiere memorizar nuestro mercantil gobierno, conviniendo interrogarse -lo que solo exige un mínimo vigor de raciocinio- acerca de qué se busca en realidad y a quién beneficia tan confusa abstracción, para acabar encontrando, siempre, el mismo beneficiario, el sucio poder oculto que otorga el capital y como agente, tonto útil, a la pequeña burguesía

Ya en 1846 -cien años antes de que yo, miembro activo -y poco lucrado- de la "casta del 78", naciera- Marx escribía que "en una sociedad avanzada, el pequeño burgués, (...), se hace socialista de una parte y economista de la otra, (...), deslumbrado por el lujo de la gran burguesía, a la vez siente simpatía por los sufrimientos del pueblo. Es al tiempo burgués y pueblo (...) diviniza la contradicción que da forma al fondo de su ser (...) y debe justificar teóricamente lo que practica, (...)", aclarando Lenin que, en la práctica, el pequeñoburgués se esfuerza para ocultar su ruin contradicción tras el delirio de un imposible izquierdismo, funesto para la izquierda genuina.

Los pequeñoburgueses forman un grupo social marginal, entre lo que eran burguesía y proletariado, casi nunca produce, genera mínimos excedentes, se mueve por la publicidad capitalista y, sintiéndose burgués, en realidad es un desclasado, siendo aquí hoy ejemplo de ello el líder máximo del populismo tipo “Evita”, que, "izquierdista" él, anheló -y logró- afincarse con su pareja -número dos de la secta- e hijos en la sierra rica de Madrid, destrozo de la clase media-alta con los más caros servicios  y miles de tejados anaranjados, severa agresión a la naturaleza, abuso de la falta de ordenación, donde quien alardea de luchar contra un Franco … muerto, teme inocentes escraches o que le llamen “rata”, en especial ocupado en si peinar moño o coleta y llevar o no un pendiente, decisiones esenciales para un, ¡uf!, vicepresidente, que no le dejan pensar en el paro, la desigualdad, su burla de le renta mínima vital, el latrocinio de los Ertes o Bankia,…-, pero no le impiden alardear de "poder" cambiarnos y derribar a "la casta" con el músculo de su selecta amistad con el "gudari" Otegi y el "intelectual" Rufián.

“Evita” Iglesias, rápido en alcanzar el lujo burgués, mala conciencia, subversivo él, tras alardear de que su padre formó parte en los años 70 del fúnebre grupo terrorista llamado FRAP, infestado -se decía entonces- por la brigada político-social, parte del PCE m-l, escisión para debilitar al -entonces hegemónico/odiado por la burguesía- PCE, ahora lo niega, al tiempo que promete luchar para que, ya alcanzado por él, el lujo sea accesible -e ignoro si obligatorio- al resto; el marxismo ha descrito a los pequeñoburgueses como freno para la izquierda, esa que hasta los años 70, aquí de verdad, sin robar ni matar, pero con riesgo personal luchó contra Franco y, ahora, al analizar casos como el señalado se evidencia que los “burguesitos” son un freno feroz para toda idea de cambio, estando apoyado el de la coleta/moño/pendiente en el aval de la identificación personal con él -que ni llega a ser burgués- que se basa en el pacto alimenticio que rige el cercado político que aún -cada vez menos- alardea de "poder".

Coda avergonzada histórica.- Mientras IU, las que unidas pueden o como se llamen ahora quienes usurpan el nombre del comunismo, se preocupan por un mini-zoo y apoyan con la PSOE el capricho del Tenis contra una escollera de piedra y, según El Delirio Montañés, sobre los 2,2 millones € pagados por levantarla, exigen otro millón más para retirarla, un amigo, viejo comunista viejo, harto de lo que ve, hastiado de hablar, criticar con otros viejos camaradas viejos, no creyendo tener capacidad para responder sin organización política o sindical, escribe un sabio dictamen sobre lo que está pasando… y lo que va a pasar y, por su -gran- valor, lo copio y adjunto; denuncia indignada/avergonzada de lo que nos queda de una memoria... sin adjetivar.



domingo, 19 de julio de 2020

114 Los domingos, cavilar Covilación 28 Revilla o la convicción del fascismo progresista Fernando Merodio 19/07/2020

114 Los domingos, cavilar

Covilación 28

Revilla o la convicción del fascismo progresista

Fernando Merodio

19/07/2020

"No soy de izquierdas ni de derechas sino progresista" (Miguel Angel Revilla. Suplemento Ideas de El País. Domingo, 12.07.2020).

"Hay algo que es seguro, estos políticos acabarán siendo derrotados por su propia voluntad de ganar a cualquier precio" (Giorgio Agamben. "Medios sin fin. Notas sobre la política")

Hace tiempo que miro hacia atrás con ira, reflexiono sobre gentes y hechos de hoy o viejos y cavilo con intención -y alguna esperanza- sobre lo que, con objetiva maldad, empobrece nuestras vidas; dolorido, sé que opinar del poder, hacerlo frente, no es gratis y que escribir sobre cosas de uno mismo, como hace tiempo alguien me dijo, es narcisista, insignificante y, además, muy peligroso en el vasto y cruel paisaje en que nos movemos pero, además de a conseguir cosas, ayuda a desahogarse; así lo veo.

Los años me han curtido en cavilar -e intentar que otros lo hagan- sobre asuntos que exceden lo propio, repulsivos mientras dura el rato del vivir, unas cavilaciones en las que aquellos que, con corrección dañina, hacen oficio diario de su impunidad de kapos, cada día más, me llevan a Auschwitz, obsesión -insana pero lógica- que hace poco me valió una leve apostilla amiga: “Un poco excesivo tomar como referencia Auschwitz, ¿no?, además no creo que tú sientas estupor ante ningún kapo ni te veas arrasado por la maquinaria del poder, tienes medios para defenderte y los usas”, con un final solidario, cariñoso, “pero me gusta cómo los identificas, serpientes miserables al servicio del poder, su oficio de todos los días, je, je,..., puedo ver como se remueven en sus poltronas cuando te escuchan o leen”. Modo amable, amigo, el tuyo de intuirme pero, lo siento, ajeno a lo que intento sugerir sin, por supuesto, el menor exceso.

Hoy evidente, cada día más, el campo de concentración se siembra, riega y nutre de claros, nítidos hechos que definen un eficaz estado de excepción -solo- conveniente para unos cuantos y sobre el que, sin apoyo en ley o norma justa, se alza una supuesta “custodia protectora”, actuación “preventiva” en favor de, mienten, intereses generales, en realidad contra ideas, individuos, actos que dicen peligrosos... para esos pocos, una bicoca: admitida tal -falta de- estructura jurídico-política justa y lógica, todo lo que ocurra en el Lager, por abusivo, inhumano o ilegal que parezca, deberá ser visto lícito, inteligible, humano, benéfico incluso; el mecanismo es sencillo, se crean ámbitos de abuso que permitan lo arbitrario, lo ajeno a la norma y se hacen habituales, necesarios, machacando sobre ellos en los repugnantes medios de (in)comunicación; si reflexionamos un poco, veremos, de modo exacto, el evidente encierro que hoy vivimos en un campo, sin que debamos olvidar lo que ratifica la experta en clásicas, feminista de verdad, Mary Beard, "el encierro no ha golpeado a todos por igual".

Giorgio Agamben exige que un análisis del daño, si quiere ser serio y eficaz, no se limite al del vínculo entre estado de excepción e inhumano lager; debiendo valorar la idea más amplia del “campo”, que no sólo es “el lugar en que se ha desarrollado la más absoluta 'conditio inhumana'”, sino la “matriz oculta” que lo posibilita, la norma que casi siempre domina “el espacio político en que vivimos”, el “espacio que se crea cuando el estado de excepción comienza a convertirse en regla”. No hay que pensar demasiado para ver cómo hoy vivimos en uno y, además, el día a día nos muestra la impunidad de políticos y ricos, las prohibiciones crecientes, la delación como norma, casi exigencia, la lógica insana de la desigualdad y el paro, la mercantil PSOE pactista, los del chalet, que decían poder y han hundido todo lo que olía a rebelión e izquierda, la derecha, que crecerá,…, paisaje a gusto del poder real, estado de alarma, luego, acaso, de excepción y, como final, ¿de guerra? Spinoza, sabio valiente, razonó que nuestro estúpido miedo a la inevitable, liberadora muerte es arma espuria en las sucias manos de aquel poder.

En Auschwitz se dio rienda suelta a la peor crueldad, burlándose, además, de los mártires: "Arbeit macht frei", trabajar libera; el "progresismo" de ahora, la mercantil PSOE, Evita Iglesias & Co., el viejo fascismo de Revilla,..., más "humanos", no nos hacen trabajar, pontifican sobre caridad "mínima". Primo Levi sufrió el Lager extremo y, antes de suicidarse aplastado por los recuerdos, dejó escrito que en el inicio de la barbarie está la idea de que el que piensa distinto de ti -o simplemente piensa- pone en riesgo tus prebendas y, por ello, es enemigo; el Lager es, pues, “producto de un concepto del mundo llevado a sus últimos efectos con cruel coherencia y mientras el concepto subsiste las consecuencias amenazan”. Michel Foucault, Octavio Paz y otros explicaron que el mecanismo de la opresión está en manos del lenguaje y lo controlan los medios de comunicación, todos, absolutamente todos en poder del dinero y la irracional tecnificación y que “su propaganda es a la democracia lo que la cachiporra al totalitarismo”; lo dicen libertad de expresión, debiera ser de todos y la han expoliado unos pocos y, con ella, han creado las nuevas formas de un Lager diferente, coto de desalmados en el que, porque les interesa, ellos deciden y utilizan sumisos kapos.

Si ello es así, que lo es, ¿dónde está el límite?, ¿dónde empieza el cruel "campo" en lo que hoy llaman democracia? En unos casos, prefijado y en otros lo fija cada cual, todos, adecuado a nuestra personal cobardía, explicando los que han vivido pruebas muy duras que, tras ello, se calla o se cuenta, y mientras el callar nace del profundo malestar que Levi llamó “vergüenza” y es la bota que dicta qué es vergonzoso o, por contra, decoroso, noble, se habla sabiendo que, tras haber sido marcados a sangre y fuego, ello nos supera y, lo genérico desborda lo específico en cada uno de nosotros.

En "Medios sin fin", Agamben define la seria distinción entre "derrota" y "deshonra" e iguala "progresismo" con "transigir", "la revolución debía transigir con el capital", "es preciso ceder en todo, conciliar todo con su contrario, inteligencia con televisión -esa siniestra Sexta- (...), medio ambiente con desarrollo industrial,a ciencia con opinión, democracia con maquinaria electoral (...)", y en eso llegó, verborreico, Revilla que tras destrozar a los obreros su tejido industrial, no planificar un molino legal, despilfarrar con Moneo, Comillas,…, seguir insistiendo en el TAV, no tener PROT ni planificación urbanística,… nos grita, como le gusta, en El País, degradado órgano del liberalismo canalla, "no soy de izquierdas ni de derechas, sino progresista" y, en tan cómodo transigir y conciliar con todo y todos, sea lo que sea, a partir de su inicial perruna fidelidad al fascismo cruel del “león de Fuengirola”, Girón de Velasco, se ha amorrado, hasta envejecer muy mal, al manantial de la peor política... con la mercantil PSOE o, da igual, la PP y alardear de que "la gente le hace caso", demostrándolo -nunca lo olvidaré, se lo haré pagar, ¡seguro!- al obligarme a poner -aunque se sea racional y solidario siempre- por la calle, en todo momento, un bozal, algo que no hizo Franco, apoyándose para ello, "convincente" siempre, en la supina ignorancia que exhibe esa "ciencia" que dice saber y en la fuerza de la “ley mordaza” y el inculto peso que, en la España del progresismo fascista, “una útil proliferación normativa que suple lo que se ha perdido en legitimidad" ha hecho recuperar a los que, con Franco, fueron único intelectual orgánico: multas -recaudatorias o coercitivas-, ejército, policía... y delación.

EL ROTO 19/07/2020

Enfrentarse al poder exige experiencia y fortaleza frente al abuso y, también, muy importante, frente al examen, el dictamen y la ignara, obscena opinión pública que el insano poder crea; fortaleza y experiencia necesarias para hacer frente al estupor que, evidente y cierto, genera la crueldad, así que, amigos, a buscar el “campo” en cada caso concreto, pensar, detectar el diario abuso, el inhumano horror, los medios tan desiguales,…, y valorar la urgencia, la necesaria fuerza del trueno que es la razón… cuando, humana, se pone en marcha pues, advertía en 1938 Brecht en ”Primavera” (“Poemas del lugar y la circunstancia”): “Al gorjeo de los estorninos / se mezcla el trueno lejano / de los cañones de las maniobras navales / del Tercer Reich”.

El riesgo hoy, como ayer, es Auschwitz y, de nuevo, el trueno lejano no lo causa la marcha de la razón, sino el ruido hosco del poder de siempre y sus emergentes kapos.

miércoles, 15 de abril de 2020

CoVilación. 10 Republicanos Fernando Merodio 15-04-2020

CoVilación. 10 

Republicanos 

Fernando Merodio 

15-04-2020 

“(...), el proceso de desmantelamiento tiene que llevarse a cabo de forma disimulada y oculta. Y esa es la primera tarea del líder político actual (...) Un muro verbal para esconder lo que está sucediendo. Y al otro lado del muro, el 'bulldozer' sigue desmantelando (...) La política para ellos es un pretexto". (Un muro y un 'bulldozer'". John Berger. El País 05.04.06) 

Ayer, 14 de abril, tras leer las nocivas memeces de siempre del rico peronista de Galapagar y mientras esperaba encontrar algo serio sobre eso en que algunos ven la solución a todos sus males y, desde Grecia y Roma -salvo los ingleses que, muy suyos, lo dicen "commonwealth"- llamamos "república", administración de la "rës püblica", los asuntos de todos, celebraba que justo a los 15 años de que, a partir de unas parejas elecciones municipales y que el rey huyera, proclamáramos nuestra II República que, no siendo ejemplar, fue quebrada por un general bajito, rechoncho y de voz atiplada, yo nacía, en domingo de ramos, pellejudo, larguirucho, chillón y, quizás por ello, bermejo, viví en Rozadío, Robacío en las “Peñas arriba" de José María de Pereda, el pueblo de Chisco, criado de Marcelo, señorito madrileño sobrino de don Celso, dueño de la casona de Tablanca, Tudanca, donde repartí mis primeros afectos, aprendí a andar, hablar, leer y escribir, conocer a los próximos, honrar a la maestra, amar la naturaleza, el monte, el río, las aves, el jabalí, el zorro, el lobo,…, explicar a los niños del pueblo, a mi modo, la mar que, ¡tan cerca!, aun no conocían, trepar pindias peñas, hacer sopas en el río con morrillos que los pastores usaban para apriscar ovejas y vacas o que, más grandes, apilados en morios, dividían en pequeños rediles el bello territorio, correr, rodar el aro, dar mínimas estivas, empacharme con andrinas -no endrinas- y moras, llagarme, ortigarme, arañarme,... aliviarme con la milagrosa nueva pomada de penicilina, usar varas de avellano para arcos, flechas, espadas,... y, a los 7 años, llevar hasta Santander la profunda "u" final del habla de la Montaña, barruntando ya entonces que, en la España oscura y triste de aquel general, tuve la fortuna, a pesar de todo, de una niñez inocente y feliz, aviniéndome a Rilke en que “la única y auténtica patria del hombre es su infancia”. 

Entiendo que ello está en la base de mi idea de apoyo a la "rës püblica", las cosas de todos, asentada en esa infancia y, luego, colegios de "curas", mal olor húmedo y agrio, sus faldones largos que ocultaban algo, las misas diarias, los rosarios, las semanas santas, el fútbol, los recreos, terrores primero y, después, dudas lógicas de que esto y lo de luego fuera eterno, Religión y Formación del Espíritu Nacional, asignaturas raras, las notas, las reválidas, el cuadro de honor,..., los largos veranos, el aire fresco que, a mis 16 años, fue Madrid, el "preu", el colegio mayor, la universidad, las pensiones, ¡la vida!, lo pesado que era el ridículo general bajito, barrigudo, de voz atiplada, cruel e inculto, el rey que juró el Movimiento, la heroica y etérea atracción de "los comunistas", las carreras, los tétricos grises, los panfletos, el cine, el teatro, la trastienda de librerías, Marx, Engels, Freud, Henry Miller,..., "Las criadas" de Genet, "Marat-Sade" de Weiss, teoría y práctica, política y sexo, vivir e, insisto, ¡aire fresco!, fútbol, el Madrid de DiStéfano, Puskas y Gento y el equipo del Hogar Montañés, Rosa, escarceos con las ciencias y estudios de derecho, única alternativa que me dieron a la Filosofía, la estúpida, odiosa "mili", la boda, Fernando y Santiago, la familia mechada de política que buscaba libertad, el Derecho, carca, usado como arma, las Comisiones Obreras de Camacho y Cote, los abogados/amigos muertos en Atocha, la fatigosa y dañina legalización, la transición injusta, líquida, el voto republicano, negativo, secreto a la constitución, la decepción que me lleva a las pequeñas bolsas de resistentes de que escribía Berger, fracasos, derrotas y, también, victorias, generosos y extenuantes maratones, traiciones, fallos, la agitación de la vida, la lucha entre Marat y Sade, ideas, lectura, enfados,... hasta que, muy septuagenario, desemboco en esto..., la vida. 

El 14 de abril, la idea de rës püblica me lleva a París, a Nanterre, la filosofía y mayo del 68, a la revolución francesa, la Ilustración, la Razón, los derechos del hombre que, además, es ciudadano, al bello cementerio Pere Lachaise y su homenaje a los republicanos derrotados por sí mismos, por el general, Mussolini e Hitler en 1939: "A la mèmoire de tous les espagnols morts pour la libertè. 1939-1945" que, tras sobrevivir al fascio, arriesgaron y perdieron la vida en defensa de ideas de libertad e igualdad para todos, la rës püblica frente a la ponzoñosa mezcla de egoísmo nacionalista y falso socialismo que aliñó el nazismo y, continuando el viaje hacia atrás en el tiempo, llego hasta Platón, al diálogo República, en griego Politeia, Acerca de la Justicia, al gobierno de la polis, referido a la idea del Estado de su época en crisis y al lugar que en él ocupa cada hombre y cada estamento, que el filósofo siempre vinculó a la Justicia. 

Me siento -y me sé- republicano hasta el tuétano, preocupado por las cosas públicas, de todos, lejano, por supuesto, a dichos y hechos de los miembros de la peligrosa amenaza mercantil de Sánchez, Iglesias & Co que -dice Alba Rico- en sus represivos decretos del confinamiento nos obligan a que distingamos -ellos no lo hacen- qué es lo esencial y cuya abusiva brigada mediática político-social, la hiperactiva Sexta -que Zapatero regaló al entrista Roures-, cual Billy el Niño, cada día es más eficaz en la totalitaria denuncia y persecución de quienes no les son afines; soy, pues, tan ajeno a esa -por decirlo de algún modo- política... como a la de los otros, a la falta de ideas frente a la realidad, a la sumisión al poder, a la constante fe ciega que, como en el mito de la caverna, hoy se nos exige respecto a las sombras que ellos proyectan sobre el muro del antro con su perverso lenguaje traidor a cosas importantes, corrupción completa de la inteligencia, transigir, conciliar todo incluso con lo irreconciliable, me veo en las antípodas de esa cosa ajena a lo republicano, melindrosa, que la mercantil PSOE/peronistas llama "progresismo". 

La rës püblica no será defendida, es notorio, por las variedades de nuestra derecha, ni tampoco por el capital, la iglesia o los poderosos entramados mediáticos que hoy dictan -su- doctrina, ni tampoco por ignaros "progresistas" que, empeñados en un disimulado, oculto, perverso proceso de desmantelamiento, levantan un verborreico muro tras el que ocultar lo que están haciendo, pretendiendo, ignaros, que para desmontar el abuso de ahora bastaría con echar al rey y, luego, atiborrar a su ávida tropa de -solo- ¿y de lo mío, qué?; sujetos peligrosos que, salvo en su verbo, formas y pizcas de demagogia que ni rozan el núcleo, social y políticamente no difieren de la derechona, capital/prensa y, basta que mande un manipulado, ridículo virus, para que no aparezca nadie y diga nada que merezca la pena escuchar sobre la rës püblica, a través del pequeño hueco abierto para decir lo que pienso, hoy, 15 de abril, dedico un emocionado recuerdo y un sincero abrazo a los olvidados que, en España, en Europa y en tiempos muchísimo más duros que los del ridículo CoV, vergüenza y evidencia de nuestra servil incapacidad para defendernos, perdieron, se plantearon -de nuevo- hacer causa común con la libertad, la igualdad y la justicia en defensa de la cosa pública y lo hicieron: esos, y no nuestros actuales codiciosos gárrulos con botafumeiro, son los republicanos.

domingo, 12 de abril de 2020

100 Los domingos, cavilar CoVilación. 9 KL. Konzentrationslager Fernando Merodio 12/04/2020

100 Los domingos, cavilar 

CoVilación. 9 

KL. Konzentrationslager 

Fernando Merodio
12/04/2020  

“Ordenar una especie de arresto domiciliario de la inmensa mayoría de los españoles, que es lo que realmente se ha hecho, no es limitar el derecho, sino suspenderlo” (Manuel Aragón. “Hay que tomarse la Constitución en serio”. 

“Los campos de concentración de las SS eran la expresión de la ideología nazi consentida por una aplastante mayoría de alemanes”. (Nikolaus Wachsmann "KL. Konzentrationslager"

Hace tiempo que miro, cavilo sobre hechos de hoy o viejos y escribo con intención sobre actos y gentes cuya maldad objetiva arruina la vida; dolorido por muertos, llego a la Cavilación 100 y se que aunque el afán de escribir sobre cosas de uno mismo es narcisista, vacuo en el vasto y cruel paisaje en que nos movemos, cavilar ayuda. 

Escribir anima, además, a cavilar -e intentar que lo hagan otros- sobre algo que excede de lo propio en el rato que es la vida y, con frecuencia, me lleva a pensar en los Auschwitz de los que, con corrección dañina, hacen oficio diario del poder impune, lo que me costó una firme crítica, a la vez amiga, que habló así: “Un poco exagerado referirte a Auschwitz, ¿eh?, además no creo que tú sientas estupor frente a la maquinaria del poder, la conoces, tienes medios para defenderte y los usas”, para añadir, pienso que solidario, “pero me gusta que lo hagas e insistas en lo del ‘sucio trabajo de todos los días’, je, je, los veo removerse en el asiento mientras lo leen”. Modo de entenderme, el del amigo, sano pero ajeno a la idea que propongo. 

El campo de concentración, KL (Konzentrationslager), lo planta, riega y alimenta una -en general- cierta o supuesta/arbitraria situación, estado excepcional, en realidad un convenio sobre el que, con -incierto- apoyo en ley o norma, se construye lo que llaman “custodia protectora”, actuación “preventiva” a favor de -dicen- intereses generales frente a ideas, individuos y/o hechos -también dicen- expuestos -al menos- para los que usufructúan -o usurpan- el poder y, a partir de tal ficción jurídico-política, todo lo que suceda en tal campo, lager, por inhumano, ilegal o abusivo que parezca, será visto lícito, humano; técnica sencilla y peligrosa que crea espacios para posibilitar el arbitrio ajeno a la norma ordinaria y llega a parecer habitual, incluso necesario. 

A mi modo, cito con frecuencia al Giorgio Agamben, para el que todo análisis del exterminio que quiera ser serio, eficaz, no debe limitarse a ver el vínculo entre estado de excepción e inhumano lager; debe atender a una idea más amplia, la de “campo”, no sólo “lugar en que se ha desarrollado la más absoluta ‘conditio inhumana", sino “matriz oculta” que lo hizo posible, norma que domina “el espacio político en que vivimos”, que “se agranda cuando el estado de excepción se convierte en regla”; hay ejemplos extremos de tal riesgo: empezar, unánimes y sin matiz o queja, por estado de alarma, luego, acaso, de excepción y, como final, ¿de guerra? 

Primo Levi sufrió hasta el límite en Auschwitz, lager dedicado al concreto exterminio sistemático de judíos, y situó en el origen de la barbarie la idea de que todo aquel que piense distinto es extranjero, pone en riesgo tus prebendas y es, por ello, enemigo; el lager es “producto de un concepto del mundo llevado a sus últimos efectos con coherencia rigurosa: mientras el concepto subsiste sus efectos amenazan”. Michel Foucault, Octavio Paz y otros explican que, hoy, los mecanismos de la opresión están, en primer lugar, en manos del lenguaje que controla el capital y la tecnificación de la política; Chomsky dice que, en manos de los poderosos, “la propaganda es a la democracia lo que la cachiporra al totalitarismo”, un poder espurio que dicen libertad de expresión que, pese a ser de todos, usurpan unos pocos, generando las formas de un lager distinto que, cuando menos, permite intuir un futuro aun peor. 

¿Dónde está el límite en el ámbito de la democracia? Hay casos en que está bien definido, pero en otros lo amplía cada uno desde su cobardía, explicando quienes han vivido experiencias duras que, tras la humillación, callas o lo cuentas y, mientras el silencio nace de un profundo malestar que Levi llama “vergüenza” y está provocado por la bota que dicta qué es vergonzoso o, por contra, noble, solo se explica aquel que sabe que, tras su maltrato, lo extremo e inhumano le supera, desborda su caso. 

Para enfrentarse a ello son precisas experiencia, valentía y fortaleza ante al abuso y, al tiempo, derrotar al examen, dictamen e ignara opinión pública que el poder genera; también hay que superar el estupor que engendra la crueldad y analizar cada “campo” concreto, pensar, detectar el abuso, la desigualdad, el horror,…, y valorar la urgencia de usar la fuerza del trueno que genera la razón en marcha. Brecht lo sabía y, por ello, escribió en 1938 “Poemas del lugar y la circunstancia”, ”Primavera”: “Al gorjeo de los estorninos / se mezcla el trueno lejano / de los cañones de las maniobras navales / del Tercer Reich”; atentos a si el riesgo son, como allí, los KL y el trueno lejano que sustituya a la razón en marcha sea el hosco ruido de emergentes kapos. 

Empiezo a leer “KL, una historia de los campos de concentración nazis”, más de 1.000 densas páginas de horrores que, desde hace meses, me esperan y que, ya en su inicio, explican cómo Dachau, primer KL, próximo a Munich, en marzo de 1933 era cárcel para 100 ó 120 comunistas, custodiados por simples policías, en agosto de 1939 ya lo era para 4.000 hombres, mujeres y niños hacinados en 34 casuchas de 100 metros de largo de los que, pese a estar vigilado por destacamentos de la Lager SS, morían relativamente pocos, mientras en abril de 1945 sus liberadores encontraron un tren con más de 2.000 cadáveres contorsionados y descarnados y 32.000 famélicos supervivientes de distintas razas, religiones e ideas, de 30 nacionalidades; Dachau fue prototipo de lager, espíritu del abuso nazi, sistema de dominación con normas, personal y organización propias que, según Primo Levi, acreditaba que “donde hay poder ejercido por pocos, o por uno solo, (...), el privilegio nace y prolifera, aun contra el deseo del poder mismo; pero ese propio poder lo protege y estimula”. 

Entrada al KL de Auschwitz

"El trabajo os liberará"

"El confinamiento os hará héroes"

Me preocupa lo que Levi llama “zona gris”, de “contornos mal definidos, que separa y une al tiempo los dos bandos, verdugos y siervos”, evidencia de cómo “cuanto más dañina es la opresión mayor es la buena disposición hacia el poder” que abusa, lo que se atribuía a seducción ideológica, imitación, ansia de poder, cálculo egoísta, terror,…, de modo que la culpa recayera en el sistema, no en los nazis o en la odiosa fauna de víctimas que, al mismo tiempo, eran “guardias nocturnos, barrenderos, lavaplatos, localizadores de piojos y sarna, mensajeros, intérpretes, ayudantes de los ayudantes, chivatos,…, pobres diablos”, o de los kapos, odiosos represores de sus compañeros de desgracia, o en la cumbre de la vileza, los Sonderkommanden, casi siempre judíos que hacían los traslados a las cámaras de gas o crematorios y servían, ya que incluso las víctimas hacían de verdugos, como argamasa en la base de, entre otras, la teoría de Hanna Arendt sobre la “banalidad del mal”. 

El viernes, aniversario de, dicen, la crucifixión y muerte de Cristo, Manuel Aragón, constitucionalista serio, catedrático y magistrado del "sector progresista” que -como casi todo en Derecho- es conservador, tras escandalizarse por la democráticamente inadmisible forma de las ruedas de prensa y fustigar en concreto a Sánchez e Iglesias, denunciaba en El País "una exorbitante utilización del estado de alarma", pues "la protección de la salud es una obligación de los poderes públicos, pero solo puede realizarse a través de las reglas de Estado de derecho", ya que "la Constitución forma una unidad, y no cabe elegir a capricho cualquiera de sus partes"; acusación que es vergüenza para toda silente, bovina actitud ante un "confinamiento" que gravemente perjudica, incluso, el derecho de otros enfermos tan graves -o más- que los afectados del virus que nos tiene en "concentración" y, aún más grave, hace temer por lo que en -la mente y la piel de- todos y cada uno de nosotros marcarán las ideas -y la práctica- de quienes -gobierno represor de penenes soberbios- así actúan…y se explican.