sábado, 26 de julio de 2025

Lo cotidiano.115 De una transición hacia el caos Fernando Merodio 26/07/2025

Lo cotidiano.115

De una transición hacia el caos

Fernando Merodio

26/07/2025

Lo visible aboca al caos, lo objetivo está ahí, pero el común humano no podemos discernir el real alcance de la emergencia climática que nos amenaza y cede ante la que dicen transición para hacerla frente, compleja cuestión vital de la que no tenemos más que unos oscuros datos y nuestro (in)capaz interés para, tras intuir, procesar algo que, insisto, supera nuestro saber y aptitud objetiva para actuar frente tan obvio problema vital, mientras capital, políticos y medios, aleves, desleales con la mayoría que cree, ¡siempre la fe!, estar segura si es- sumisa, dicen que ganarán la difusa lucha contra tal emergencia de caos humano con una transición energética o, peor aún, ecológica, quimera global que, siervos del 1%, del capital, blanden los (des)gobiernos, próximos o supranacionales, el de aquí débil, corrupto, ignaro desde lo que llama Ministerio para la Transición Ecológica y el Reto Demográfico, a cuyo acrónimo, MITERD, sincrético hasta el tuétano de lo perverso viejo/nuevo, sigue diciendo MITECO, verruga, grave tumor, artificio jurídico -y científico- indeterminado, útil -solo- para los muy pocos, desde el que sombríamente nos amenaza la tétrica advertencia del reto demográfico, sin más solución masiva que la dada, no hace mucho, por el nazionalsozialisno. Tiempo al tiempo.

El Roto  24.07.2024

Sólo para eso se acerca el pastor a nosotras

La situación es tan grave que incluso los 15 jueces del inane Tribunal Internacional de Justicia, TIJ de la ONU, nada radical izquierdista, emitían unánimes, el pasado miércoles una -como siempre- fútil, solamente consultiva opinión sobre la “urgente y existencial amenaza” del daño climático y la lógica “obligación de cooperación internacional” frente a ella, llegando a decir, impúdico, su presidente, Iwasawa Yuji, que “la protección del entorno es una precondición para proteger los derechos humanos”, pues “el derecho a un entorno sostenible es condición indispensable para disfrutar de los demás derechos”, hasta el extremo, ¡pásmense!, de alardear -¡oh, novedad!- que incumplir tan vital, humana obligación “puede constituir un acto ilegal” ¿Lo es, por ejemplo, la evidente tropelía que en muy protegida Red Natura 2000, Zecs -Zonas  Especial Conservación- y Zepas -Zonas Especial Protección Aves- río y embalse del Ebro quieren perpetrar, entre aplausos, Iberdrola/Banco Santander y Valcarce, conseguidor jurídico “para la democracia”, con lo que -lenguaje perverso-  llaman P.E. El Escudo, ayudados por Revilla, la PSOE, Burundanga,… en territorio MUP propiedad en mano común de los vecinos? Se ven impunes, se creen sin riesgo para ellos, solo hay una Plataforma y cientos de miles de las ovejas de El Roto, a las que El País anima, ¡siempre la fe!, a creer que -para que, tras ello, sean menos- “los tribunales nacionales deben aplicar esta doctrina internacional, haciendo que tanto gobiernos como empresas rindan cuentas”¡ Produciría risa, si no fuera tan tétrico!

Miles de m3 de puntales de madera en un puerto de Australia… u otro sitio: transición industrial energética

Analicemos ahora lo de la milagrosa “transición” que, igual que otros perversos, el gobierno, MITERD/MITECO presenta como solución para el vital problema del clima y veremos, sin duda, que la histórica “transición/fasismo” -funcionar en fases- es falsa pues, en el uso del material que genera energía, nunca ha sucedido -ni sucederá- tal cosa con el capitalismo, siendo lo real que madera, carbón, petróleo, gas, nucleares, renovables,…, lo explica irrebatible Jean-Baptiste Fressoz en su libro “Sin transición. Una nueva historia de la energía”, se han superpuesto, sin sustituirse nunca y esas materias energéticas “se han desarrollado una tras otra y han crecido juntas, entrelazadas en un sistema complejo que dificulta cualquier transición real”, ¡es la cruel historia del capitalismo, estúpidos!, obediente al interesado interés del dinero, así que tal “transición”, en especial la “ecológica”, es solamente un “relato tranquilizador, futurología oficial que, desde los años setenta, sirve más para aplazar decisiones que para transformar el sistema”, férreamente, controlado por el capital, algo que, según Fressoz, nos obliga a repensar, sin dejarnos engañar, las dinámicas energéticas, la histórica relación entre materia y política y, ahora, los obstáculos reales que tendremos si, de verdad, luchamos contra el etéreo/real “cambio climático”; debiendo leer el denso, trabajado libro y evitar la perversión con que Clemente Alvarez -nunca fiable- titula en El País, biblia del liberal progresismo, para desanimar a quien se plantee luchar, que “la neutralidad climática es inalcanzable” y convierte materia tan seria, respetable/respetada por (aquel)la izquierda como es la “austeridad” marxista que diseccionó Enrico Berlinguer, secretario general del poderoso PCI, transformándola en apocada, ¡perverso lenguaje!, “sobriedad”; la seria, solidaria  austeridad” es el medio que nos queda, ¡ya somos más de 8.000 millones en la Tierra!, pues el desaforado consumo no admite fases y exige acumulación masiva en el uso de madera, carbón, petróleo, gas, nucleares y, ahora, renovables, que son suma de todas, junto a metales raros, plásticos, fibras, expolio del mejor territorio de todos,…, para frenar la emisión de CO2 a la maltratada atmósfera, siendo que, aparte de -¿lo recuerdan?- otra útil -y más agresiva- pandemia o un exterminio neonazi, no hay más camino que frenar en seco la generación/consumo energético, ser política, solidaria, justamente austeros, no ridículamente “sobrios”, imitadores de quienes, en mi infancia/juventud, eran forzados a abandonar el desahogo del alcohol barato, como propone Clemente Alvarez en el panfleto liberal/progresista, hoy aliado del bloque -¿a qué precio?- de Sánchez, el psicópata/licitador y su delictiva troupe, en el procaz pacto TVE/El País/Ser, con Javier Ruiz y Pepa Bueno, granujas sin alma, como avanzadilla.

Texas 1906, torres de madera, ¡así eliminó el petróleo el uso energético de la madera!

Coda sobre el cambio climático.- A partir del irrebatible dato histórico de que en las dos -falsas- “transiciones energéticas” USA en los siglos XIX y XX, de la madera al carbón y de éste al petróleo, en realidad acumulaciones, EXXON ya estaba allí para “salvarnos” y lo está ahora, vigilado (¿) por el TIJ de la ONU, tras la “crisis energética”, en la -también falsa- “transición renovable” contra el “cambio climático”, igual que están aquí la Iberdrola de Ignacio -sin Sánchez- Galán, Banco Santander de Ana -sin Patricia- Botín y su conseguidor jurídico “para la democracia”, sabemos que, de ser preciso, el nuevo liberal/progresismo nazionalsozialista eliminará, radical, el problema sin “transición” ni cálculo de velocidad productiva del nuevo/viejo material energético con miles de millones de ovejas menos. Si no hacemos algo, tiempo al tiempo, insisto.

sábado, 19 de julio de 2025

Lo cotidiano.114 De Marcuse, nazionalsozialismo y burundanga Fernando Merodio 19/07/2025

Lo cotidiano.114

De Marcuse, nazionalsozialismo y burundanga

Fernando Merodio

19/07/2025

De pronto, he regresado a los primeros 70s del pasado siglo, cuando aún Sánchez el Malo, Trump y Putin no nos destrozaban la vida, lo hacían Franco, Nixon y Brezhnev, yo no había llegado a los 30, acababa de casarme con Rosa y, tras ello, nacido el primero de nuestros dos hijos, la PSOE seguía, ¿con el oro robado a quienes no se rindieron?, gozando, no sé dónde, unas largas, placidas vacaciones, sin que entonces alterara su cómoda, mercantil estructura la -posterior/impostada- preocupación por los huesos de quienes acabaron en cunetas y sus tataranietas; lo he hecho tras leer la reseña periodística de “La teoría crítica en la era del nacionalsocialismo. Ensayos (1934.1941)” de Herbert Marcuse -y todo él en diagonal-, hurgando entre mis -mal- acaldados libros, hasta que hice (re)aparecer, suyos también, -¡cuánto joven esfuerzo para intentar entender algo!- Eros y civilización, El hombre unidimensional, Razón y revolución, Psicoanálisis y política,… todos con mi apellido y un 1970 y pocos en la primera página, con ideas del Marcuse que, utilizando Marx, psicoanálisis y teoría crítica, revolucionó los campus en aquellos viejos y -al contrario, por muchas razones, de estos- excitantes años en que -unos pocos ilusos- intentamos cambiar el mundo.

En mi ajada soledad actual, la diferencia entre esto y aquello es patente, en la España de entonces, sin ayuda, cuatro gatos nos creímos, ¡ay, la fe!, capaces de virar la Historia, creamos la idea de que, solos nosotros, la mejoraríamos muy fácil, yo entonces inmerso en la felicidad que era Rosa y la juventud convencida de hacer lo que debía y evitar cada mañana odiar con -reflexivo- desprecio mi cara en el espejo, no entendiendo que la -aparente- mejora del 78 que -siempre- a otros beneficia, la decidían esos otros, y ahora, siendo cada día todavía somos menos y lo que nos rodea, es cierto que, salvo victorias puntuales, ¡ay, los molinos!, nada va a cambiar.

Marcuse, anciano, sentado en una escalinata en la universidad

Marcuse fue un filósofo, alemán por supuesto, activista que huyó de los nazis -no sé si, además de la vida, ganó mucho- a las universidades USA, armado con la “teoría crítica” de la Escuela de Frankfurt -a partir de Hegel, Marx y Freud, gente que pensaba, Weil, Pollock, Adorno, Fromm, Löwenthal, Horkheimer, Lukacs, Benjamin, Habermas, Bloch, Arendt, Russell, Foucault,…- que, enfrentada a la -entonces- sociedad moderna y sus estructuras de poder, alentó la idea de que la libertad no es solo ausencia de opresión, sino posibilidad de que el individuo, la persona desarrolle todo su potencial, siendo clave de tan lógica teoría en Marcuse la “racionalidad crítica”, capacidad de, tras analizarla, desafiar la norma, saber ver en las estructuras sociales la “represión” del deseo y enfrentarse a la “falsa conformidad” que impone tal sociedad unidimensional, convirtiéndose, él, en ariete del pensar contracultural que, apoyado en la agitación social, fue germen de los movimientos estudiantiles, de los derechos civiles, feministas, en favor del medio ambiente y contra el consumismo, que hoy algunos fútiles, ridículos arrastran por el suelo, movimientos que -pese a su certeza- fueron vilipendiados a causa de su marcado pesimismo utópico.

Así me veo/recuerdo, como aquel Cohn-Bendit, riéndome del vacío bajo el brillo de sus cascos

De ahí, entre otros orígenes, nació el feraz, agostado por políticos y frívolos, “mayo del 68”, Cohn-Bendit, Sauvageot, Geismar, Krivine, Tautin, Rudi Dutschke, muerto, tras un atentado, en Aarhus, donde quiso nacer el derecho a participar informados, jóvenes asentados, cada uno a su modo, en ideas tan lógicas  como, en primer lugar, la crítica de la -muy- dañina sociedad capitalista, cuyo conformismo sofoca la libertad real con falsas exigencias, que alienando al individuo, lastran su aptitud para cuestionar la realidad impuesta, impidiéndole acercarse a las reales necesidades humanas, sustituidas por un consumismo compulsivo que obstruye la crítica al orden establecido y frena un cambio social basado en la útil razón dialéctica dedicada, no a estériles debates con el sistema, sino a denunciarlo/derrotarlo hasta la emancipación política, no solo personal, social y, así, acabar con el pensamiento impuesto.

El Roto 17//07/2025

Este máster se impartía, más barato, en el aula de al lado a los de Begoña

Y es que el cercano nazismo, hoy más actual que nunca, merece el inusual esfuerzo de pensar -un poco- y no dejarse mecer en la cómoda corriente que lleva a la catarata que, para nosotros es tal “nazional-sozialismo”, engrudo que -no a los ultras- ata a La Moncloa al yerno y la hija de un proxeneta, esos que -cada día más- se parecen a lo de Perón, Maduro o Mussolini, socialismo que con “z” -¡si Marx viviera!- dicen “progresismo” e, incluso peor, el insolidario chantaje del nazionalísmo pequeño de amigos del tiro en la nuca no contritos, golpistas amnistiados -desde los Cárpatos- por el conde Pumpido y los -listos- que recogen la fruta -de todos- del árbol movido, amorrados a la teta de la mercantil PSOE y sus rémoras, como explicó muy bien, ¡un esfuerzo y leamos!, Marcuse en “Teoría crítica en la era del nacionalsocialismo. Ensayos (1934-1941)”, al decir que “liberalismo y totalitarismo son dos fases del proceso”, fijas, cómodas, ¿lo duda alguien?, con “la misma base económica: el capitalismo”, amo a cuya exigencia responden, tal como, preciso, dibuja El Roto.

Esto es -y mucho peor- el camino y “pogreso” del horrísono ruido amigo de Sánchez/Buruaga

Coda sobre burundanga y jaurías.- Se oye ya ahí cerca el horrísono taconeo nazionalsozialista de Sánchez y sus socios, que -¡uf!- interesa al capital y es tiempo de jaurías salvajes, aquí de lobos, estos sí, crueles y, según un aburrido amigo, el digital ¿y El Delirio?, la voz de su amo, cuenta que una de ellas, la de los Iberdrolos que cohabitaban con el vampiro Montoro -¿y otros?- y ahora vive  en molinos y alardea de destrozar, bello territorio en mano común de vecinos y pueblos, el -muy protegido- entorno Red Natura 2000, sierra del Escudo, Zecs y Zepas río/embalse del Ebro, con burundanga -efectos amnésicos y alucinógenos vinculados al delito-…, ¡perdón!, me corrige el amigo -mientras esto escribo, mira sobre mi chepa- que no era burundanga, todavía peor, era la presidenta -¿qué pintaba en tal jauría?- Buruaga, cuyo mérito es tener el encefalograma, EEG, plano, por lo que ni sabe que el contencioso está vivo y quedan, frente a la tropelía, cautelares y casación, acciones civiles y penales contra personas en sus diversas variantes, así que jaurías, corruptos y corruptores, no tienen nada que celebrar y alguien debiera parar, ¡¡¡ya!!!, el destrozo. Al tiempo.

domingo, 13 de julio de 2025

Lo cotidiano 113 De un tiempo de canallas, redes/medios y proxenetas Fernando Merodio 13/07/2025

Lo cotidiano 113

De un tiempo de canallas, redes/medios y proxenetas

Fernando Merodio

13/07/2025

Los canallas lo tienen -cada día- más fácil gracias a las redes… y otras cosas.

Dice Djokovic, ya mayor y -of course- en “su red social”, que las redes (…) están muy presentes y determinan en gran medida el estado de ánimo y el ritmo diario de un atleta (…). Todos están en las redes sociales, y uno puede perderse en ellas (…) con lo que alguien escribe en un teclado o en el teléfono... y eso duele. No es trivial. Es algo de lo que debemos hablar seriamente”, viendo yo, al contrario, que quien no tiene redes, coche, tarjeta bancaria, ni smartphone,… y, pimpante/solo, ha llegado al tramo 80, recordando, lejano es cierto, cuando en Rozadío, doña Gloria y el Sr Merodio le iniciaban en lo de que la “p” con la “a” era “pa” y él, listuco en aquel entonces, colegía que, “pa-pa” era el hombre que afín, exigente, cariñoso, buen o mal ejemplo,…, le explicaba, al tiempo de la maestra, lo de “pa” y, además, esencial le aseguraba comer a diario, una casa con techo y una cama, viendo cómo algunos, muchos, se quedaban en lo de “pa”, sin llegar siquiera a intuir “pa-pa”, habitual fallo intelectual y/o de comprensión lectora, matraz del daño que causan los plumillas, escribidores que, como un tal Daniel Martínez, viven de contar mentiras en sus medios que, diga lo que diga Djokovic, son mucho peores que las redes; Berlusconi, lo tenía muy claro.

Lo que dejan ver los medios de Berlusconi, Trump, Putin, Sánchez, Feijóo,…, iguales

Tal base ayuda a intuir -parte de- lo de, entre otros, ese tal Juanjo Millas, escribidor rústico vil hagiógrafo en la revista de El País del -muy- siniestro Zapatero, Zapatitos, el de la zeta o la ceja que repartía maná a la farándula fiel, con dos hijas góticas que intentó ocultar junto a Obama e, impúdico, lo hace también -dicen- hoy -¿por qué?- en Venezuela, un escribidor que emborrona una plana de su envilecido medio con una charla -igual que con Arsuaga-, con “ChatGPT”, haciéndome perder un rato -sin smartphone, coche, ni tarjeta bancaria- para cursar que chat es intercambiar mensajes, of course cortos, en internet y que el concreto GPT, útil, ¿para quién?, usa, ¡uf!, a falta de la natural, “inteligencia artificial entrenada” -¿por quién?-, una plana que, evidente por qué, tituló “Mi charla con ChatGPT sobre el comité federal” previo a la canallada del lúgubre Sánchez y sus -todos- gorrones/socios que, a nuestra costa, le sostienen de pie, groggy, y le permiten alardear que prohibirá la prostitución, siendo él -lamento usar como fuente a Feijóo- “familiar beneficiario a título lucrativo” de un proxeneta, penosa inmoralidad de la que nadie pretenda que yo -sin vivir de la política- no exija cuentas al canalla que nos manda sobre su vínculo con -dicen- el dinero de lo peor -¿dónde está ahora?- de la prostitución, el proxenetismo y, pues -¿en el pueblo?- no hay dignidad para echarle y sus fétidas rémoras le aplauden, pese a saber que para Gonzalo Miró denunciarlo tiene “un punto de homofobia vomitivo”, impotente grito, ¡que se vaya!, ¡que, tan dañino, se muera ya!, ¡que humille al huérfano de Pilar Miró, pues cobra, pero a mí no!, aplaudiendo, en particular, ¡ahora sí!, a las “feministas cheli progresistas” y la inclasificable Yolanda que ufana se soba con quien, al parecer, ha vivido -¿y aún se lucra?- de lo más repugnante de la prostitución, el proxenetismo. 

Chaplin fue uno de los –pocos- que aguantó el tirón

Lillian Helman, magnífica escritora,  fiel compañera/sostén hasta su final de Dashiell Hammet, hombre que nos legó lo mejor de la novela negra, sufrió el macartismo y llamó esa época en el titulo de su autobiografía, “Tiempo de canallas”, explicando cómo -lo dijo Orson Welles, un genio- los -que se decían- “intelectuales progresistas” no entregaron su alma al sistema “por amenazas de muerte, miseria o cárcel, sino por sus piscinas”, lo que los de ahora hacen por una vil soldada que nunca ganaron y, cutres, aplauden al celestino/alcahuete que, dado el momio de sucio poder a que está aferrado, debiera demostrar que no tiene nada que ver con sexo/dinero y, mientras aquella América -no mejor que la de Trump- preguntaba a Ring Lander, Jr., “¿ha sido usted miembro del Partido Comunista?” y, tras un serio debate con el miserable que le interrogaba, en lugar de acogerse como los más fignos del resto al derecho a, Quinta Enmienda, no incriminarse, le explicó que le “podría contestar, pero si lo hiciera, me odiaría cada mañana”, opuesto a lo de los no contritos cómplices de asesinos, los que cogían la fruta que aquellos vareaban, los -por egoísmo- golpistas y la troupe de la cursi imitadora de -al tiempo- el feo populismo de  Evita Perón y el quiero y no puedo de parecerse a Isabel Tocino, que se arrastran para que el poca cosa pillado en lóbrego agio -profesional- sexual, al que medios cómplices -no redes- miman, no caiga -cueste lo que cueste- y siga saciando -con lo de todos- sus guarras codicias, deberían -uno a uno y sin la inane excusa de lo ultra- rendir cuentas.

Lo suscribo, para la España de Sánchez el Malo, de la cruz a la rúbrica

Coda sobre el pensamiento y la patria que es la infancia.- Verdi compuso para la ópera “Nabuco” el muy bello “Va, pensiero, recordemos que es el “Coro de los esclavos”, ¡Ve, pensamiento, con alas doradas, / pósate en las praderas y en las cimas / donde exhala su suave fragancia / el dulce aire de la tierra natal!” y, en el hoy de aquí, si cotejamos al acartonado Berlusconi, al que, duro y serio, golpeó Riccardo Muti, con la tétrica trampa/fraude de Sánchez el Malo, aquel sería una casi pueril, previsible filfa.

domingo, 6 de julio de 2025

Lo cotidiano 112 De -unos pocos- quijotes, “mano común” y molinos reales Fernando Merodio 06/07/2025

Lo cotidiano 112

De -unos pocos- quijotes, “mano común” y molinos reales

Fernando Merodio

06/07/2025

Las que, pareciendo gracias. dicen “tres maldiciones chinas”, son -malos- deseos: “ojalá que vivas tiempos interesantes”, cáustica alusión a trocar tiempos aburridos, pacíficos, felices por otros intranquilos, caóticos, difíciles, “ojalá llames la atención de las autoridades”, referencia poco deseable a generar envidia u odio en un poder venal y “¡ojalá te concedan todos tus deseos!”, quizás la peor, pues incluso la felicidad exige serios medios para su correcta gestión; sufro, intensa, la primera, también la segunda y, al menos hasta hoy, ni me roza la tercera.

Flavita Banana 03.07.2025

Gracias Flavita, ¿es eso la felicidad? Agitado y viejo, -casi- no lo conozco y -lejano- lo añoro

A partir de ello, Slavoj Zizek, buen, activo psicoanalista/filósofo esloveno, a su modo comunista/marxista, escribió un libro titulado “¡Bienvenidos a tiempos interesantes!”, en el que, entre otras cosas -de interés-, dice -ya tarde- que “quizás haya llegado el momento de criticar esa actitud que domina nuestro -tranquilo, sin guerras cerca- mundo de liberalismo tolerante y multicultural (…) y quizás -¡sin duda!- sea necesario administrar una buena dosis de intolerancia aunque solo sea con el fin de suscitar esa pasión política que alimenta la discordia”, opuesta radical al penoso pactar con quien sea del liberal-progresismo, tan nocivo como la -otra- derecha, algo que aquí hoy nos anega, aclarando Zizek, sin ambages, que ”tiempos interesantes son, de hecho, tiempos de inestabilidad, guerras y lucha por el poder que dejan millones de víctimas inocentes”, primera maldición china que, como siempre, el pútrido 1% y sus siervos, siempre trae.

Cervantes, gigante de vida personal no mejor que la nuestra, legó, eterno, el viejo, seco y real personaje que por edad y lectura, ¡vaya males!, creyó -dicen- que luchaba contra gigantes que su -más joven, orondo y lego- adjunto de andanzas describía, con primitiva y rústica firmeza, no como tales, como retóricos molinos y, pues no procede hoy debatir aquí sobre La Mancha real de inicios del siglo XVII, no voy a discernir sobre quién tenía razón, pero sí dejaré claro que siempre hubo -y si no lo corregimos, habrá- gigantes/enanos que, (ab)usando del opresivo, -siempre- espurio, injusto poder, fomenten cobarde, cómoda pasividad bovina y, así, opriman -¡ay, Marx!- al resto y, viniendo a lo concreto actual, digo que aquí hoy reemplaza a los expresivos gigantes que alteraban al hidalgo manchego la mezcla del difuso, furtivo -visto junto a Trump, un shock- grupo inhumano del cruel, odioso 1% y su hoy increíble, desleal cuento chino para niños -o Sancho Panzas- de lo “renovable que sus torvos medios de (in)comunicación de masas tergiversan, retuercen y vinculan -aquí cerca- a generar energía eólica de forma masiva, concentrada, lejos del lugar de consumo, usurpando el mejor territorio comunal,… y plantar molinos, malignos gigantes artificiales.

El Roto 03.07.2025

Parecían molinos pero son gigantes y el zapato no importa, tras la caída no se anda

Entre la dirigencia afiliada a sectas/empresas/partidos, que prospera al pestilente hedor de establo y nunca dejaré de vigilar por dañina y cobarde, ni de despreciar por miserable e inhumana, hoy desnortada -a mí, al menos, ¡siempre me quedará el Madrid!- no lectora de Lampedusa, pero sí gattopardista sabedora de que, rebaño, tiene que “cambiar todo para que todo siga igual” pero, cobarde, quiere sobrevivir supliendo -solo- al cruel apparàchik de organización por otro/otra más vano y corrupto.

Enfoco mi interés en lo concreto -que me parece- cierto, determinante, mientras me deterioro y algún amigo me dice que -sin que yo interprete si es bueno o malo- arrastro lo peor de quien, en esquelético jamelgo, recorría La Macha compilando golpes o del achacoso, inseguro físico grande del actual Clint Eastwood que, en Gran Torino o Mula, decae físicamente sin llegar a desplomarse al pisar con mi pata derecha -casi- de palo los bellos montes de nuestro bello sur ¿vacío?, ¿vaciado? Y no ver, orgulloso, salvo a lo lejos en territorio de otros más molino que el ridículo “experimental” -¿para qué?- de Vestas o los añejos cachivaches que tanto gustan al corregidor de Luena, insistiendo en que orgulloso y -me (pre)ocupa- casi soberbio, junto a algún admirable, disfruto de que pese a los ímprobos esfuerzos del hijo y sobrino de quienes fueron fiscal jefe y presidente del TSJC “para la democracia”, aquí no crecen los tallos que basan la historia del hombre de la Mancha; siendo nuestra tierra de “montes vecinales en mano común que, pese a loarlos -sabio- Eduardo García de Enterría, la pepera -no progresista- consejera de Montes y el inepto -o peor- director regional odian, pues mol esta que el artículo 1 de la Ley 55/1980, post-constitucional, los defina “montes de naturaleza especial que, con independencia de su origen, pertenezcan a agrupaciones vecinales en su calidad de grupos sociales y no como entidades administrativas y vengan aprovechándose consuetudinariamente en mano común por los miembros de aquellos en su condición de vecinos”, ¡es la democracia, la democracia directa, la muy débil/difícil democracia, estúpidos! y; en la aldea cántabra -Registro de la propiedad y administrativos- son los montes de utilidad pública, MUPs, algo que ignoran incluso los tribunales, propiedad jurídica de los ricos vecinos de vaciados, vacíos pueblos, no de parásitos entes burocráticos, Estado/nación, regiones, ayuntamientos, concejos,…, ni mucho menos del dinero, el capital o cualquier otro medio que el poder espurio degrada a su servicio, siendo en esos montes -aquí cerca- donde unos -muy- pocos nos libran de tener que, cual ingeniosos hidalgos de la Mancha, alancear molinos, ahora, además, unido a la dura lucha de impedir -como sea- que la consejera de Montes que teme conocerlos, el transparente, líquido director regional al que mejor sería no haber conocido, unos jefes de servicio resbalosos, unos jurídicos inexistentes y una burocracia -por hermética, servil, cara e inepta- tenebrosa que, junto a un alcalde del prototípico, histórico caciquil clan familiar “los Marina”, quieren robar a los vecinos de Arcera-Aroco, la madera de las 400 Ha de su MUP 250 Dehesa y Rubacente. Seguiremos informando.

Aprovechamiento comunal o -en este caso- expolio de “monte en mano común

Coda a mi querida Rosa, que me dejó sólo.-- También me dicen que los malos reales, muy poca cosa y muchos, avizoran -la desean- mi cronológica, humana, próxima muerte, pero, siendo -solo- fuerte, intento prolongar, cada día más radical y -para ellos- más necio, la estadía aquí intentando (de)mostrar -en el cielo en que está- a Rosa que, junto a -deseo- alguna otra dicha, los 58 años que, amorosa, quiso vivir con mis ideas le merecieron -algo- la pena.